
Con un sobresaliente primer tiempo, apoyado en un arranque de partido marcado por el tempranero gol de Pablo Durán y la enésima exhibición futbolística de Iago Aspas, el Celta noqueó al Dinamo Zagreb (0-3) y confirmó su candidatura a una de las plazas directas para la siguiente fase de la Liga Europa.
Claudio Giráldez apostó de inicio por piernas frescas para presionar al Dinamo. Marcos Alonso, Ilaix Moriba, Mingueza, Ferran Jutglà y Borja Iglesias, habituales titulares, arrancaron en el banquillo, quizás por el duelo liguero del domingo contra el FC Barcelona.
Y con esa asfixiante presión, el Celta empequeñeció a un rival que llegaba invicto en la competición continental a este encuentro. A los cuatro minutos, Aspas encontró a Pablo Durán al borde del área. La pasividad defensiva del Dinamo le permitió armar la pierna para sacar un potente disparo pegado al poste. Esa es una de las mayores virtudes de un futbolista que hace cinco años jugaba en Preferente.
Ese gol aumentó las dudas del equipo de Mario Kovačević, al que Jones El-Abdellaoui casi golpea nuevamente tras una salida temeraria del portero Nevistic. El Celta hacía daño por la banda izquierda, donde Bryan Zaragoza castigaba a Théophile con su velocidad en el uno contra uno.
De una de esas acciones del exfutbolista del Bayer Múnich nació el 0-2, después de que el español Sergi Domínguez introdujera en su propia portería el balón al intentar despejar el centro hacia Pablo Durán.
El Celta jugaba al ritmo de Aspas. El internacional español interpreta el juego mejor que nunca desde la nueva posición que le ha encontrado Giráldez lejos del área. Cada vez que entró en juego, el Dinamo sufrió. En el minuto 37, Miguel Román remató demasiado alto en inmejorable posición.
Poco a poco, el Dinamo empezó a tener más balón. Y antes de que Pablo Durán firmase su doblete, tras una espectacular jugada que inició Aspas y condujo Bryan Zaragoza, el equipo croata disfrutó de una inmejorable oportunidad para meterse en el partido, pero Iván Villar sacó el remate de Kulenovic. Y del posible 1-2 al 0-3 en apenas un minuto.
Con una ventaja ya demasiada cómoda, el Celta dio dos pasos atrás para conservar un triunfo de oro. Eso favoreció al Dinamo, que dominó más, pero sin generar peligro. Los minutos pasaban y el Celta no sufría. Giráldez refrescó su once, como antes había hecho Kovacevic en busca de un gol que Iván Villar sacó a Stojkovic en la recta final.
Por su parte, el Betis logró un solvente triunfo (2-0) ante el Olympique de Lyon francés, que llegó a Sevilla con un pleno de tres triunfos y que sufrió en La Cartuja la primera derrota en esta cuarta jornada de la primera fase de la Liga Europa, lo que deja al equipo sevillano bien situado en el ecuador de este tramo del torneo con ocho puntos -dos victorias y dos empates-.
El marroquí Ez Abde, al borde de la media hora, y el brasileño Antony dos Santos, pocos minutos después, pusieron el 2-0 al descanso y ya en la segunda parte la formación que entrena el chileno Manuel Pellegrini no tuvo problemas para controlar el partido sin desgastarse.
Y por último el Rayo. on goles de Isi Palazón, Jorge de Frutos y Álvaro García, los tres en la segunda mitad, ganó en Vallecas al Lech Poznan, que previamente había marcado por medio del hondureño Luis Palma y el polaco Antoni Kozubal, en el partido correspondiente a la tercera jornada de la fase de grupos de la Liga Conferencia.
Con este resultado el Rayo Vallecano suma siete puntos en tres partidos y se mantiene entre los diez primeros de la clasificación mientras que el Lech Poznan se queda con tres puntos.
