
Luis Campos, asesor externo del PSG, se frota las manos. El luso debe reforzar todas las líneas del conjunto parisino y cuenta con el dinero del traspaso de Kylian Mbappé para llevar a cabo su plan. En su hoja de ruta no está el astro galo. Su salida provocará un efecto dominó que traerá consecuencias nefastas para otros equipos. El mercado, a nivel europeo, está muy poco activo a la espera de que comience a moverse dinero con el que será el traspaso más caro en la historia del fútbol.
Uno de los equipos que más perjudicados pueden salir tras el seguro adiós de Kylian al PSG es el F.C. Barcelona. El fichaje elegido en París para cubrir el hueco de su estrella es Ousmane Dembélé y hay un plan para sacarlo a la mitad de su precio.
RMC Sport avanza el interés del PSG en cerrar de inmediato el fichaje del Mosquito. La cláusula de rescisión de su contrato -termina en 2024- es tan solo de 50 millones de euros si se abona antes del 31 de julio. A partir del 1 de agosto, su cláusula aumentará hasta los 100 millones.
El Barcelona, que cuenta con el jugador, está nervioso. Saben desde Can Barça que una gran oferta desde París podría seducir a un Dembélé que además se llevaría 25 millones de euros de la operación. Es decir, de los 50 millones que pagaría el PSG, el Barça solo ingresaría 25 y la otra mitad se la repartirían el propio Dembélé y sus agentes. Unos agentes que huelen la sangre como buenos tiburones que son y se relamen pensando en el preciado botín que les puede caer si Ousmane sale del Barcelona.
En París ya dan por hecho el acuerdo entre el Mosquito y el PSG. Dembélé firmará hasta 2028 y en el Barcelona existe pesimismo sobre una operación ruinosa que, teniendo en cuenta la nefasta situación económica que atraviesa el club, derivará en un descenso evidente de nivel, ya que es complicadísimo encontrar un sustituto de garantias con 25 millones.
Las próximas horas serán clave, en menos de 12 caduca la cláusula de 50 millones por lo que la resolución será inminente.
Los azulgranas necesitan urgentemente dinero -no pueden inscribir a los nuevos fichajes al tener el límite salarial superado-, pero consideran que recibir solo 25 millones por un jugador clave para Xavi sería un palo terrible. Ansu Fati, Ferran Torres y Kessié están en el escaparate, pero de momento nadie suelta la panoja. El estado físico de Ansu genera muchas dudas, Kessié tiene mercado en Italia y la Premier, pero sus pretendientes le quieren cedido con opción de compra y por Ferrán ningún incauto pica el anzuelo.
El efecto colateral de la salida de Kylian Mbappé del PSG va a dejar muy tocado a un Barcelona que cruza los dedos para que pasen sin alteraciones este último día de julio. La vida del Mosquito en la Ciudad Condal parece que llega a su fin.
