El F.C. Barcelona ha calcado este verano lo que viene repitiéndose de manera sistemática en los últimos mercados estivales desde que Joan Laporta accedió a la presidencia del conjunto culé. Todo comenzó cuando el presidente del Barcelona abrazó un maniquí prometiendo que en un asado cerraría la renovación de Lionel Messi y la última laportada ha sucedido está madrugada, cuando el Salzburgo le birla a Stefan Bajcetic, el jugador que ansiaba la dirección deportiva del conjunto azulgrana para tapar el hueco dejado por la trágica lesión de Bernal -el canterano se hizo trizas el ligamento cruzado en Vallecas y estará de baja toda la temporada-. Como si de un botafumeiro gigante se tratara, el Barcelona de Laporta se ha especializado en ser un generador de humo.
Este verano, ya desde sus inicios, los medios afines al club dieron una tabarra terrible con el objetivo prioritario de Nico Williams. Movieron tanto el avispero que terminaron por enfadar a un Athletic que se dio el gusto de quedarse, al menos un año más, con su gran estrella.
Tras el fracaso y el ridículo firmado por el Barcelona en el ‘Caso Williams’, tocaba seguir ilusionando a la afición vendiendo alfombras con nombres potentes -Leao del Milán o Chiesa de la Juventus sonaron con fuerza-, que en realidad eran totalmente inalcanzables. El caso es vender el pollino, seguir generando humo y tener al personal entretenido.
Es cierto, todo hay que decirlo, que se fichó, en una gran operación, a Dani Olmo, pero la situación económica nefasta y un límite salarial asfixiado hicieron que el ex del Leipzig no se estrenará hasta la tercera jornada, gracias a la triquiñuela con Christensen.
La realidad del Barcelona, a día de hoy, la refleja el 'Caso Bajcetic'. El jugador, que estaba cerca de cerrar su cesión desde el Liverpool al Salzburgo, saltó a la palestra este miércoles cuando se conoció el alcance de la lesión del canterano Bernal. Era el objetivo prioritario de Deco y el resto de la dirección deportiva, estaban dispuestos a pagarle 4 millones de euros al conjunto ‘Red’ por una cesión simple, sin opción de compra. Flick lo quería a toda costa, pero esta madrugada todo se fue al garete.
De nuevo el límite salarial era el problema y ni el Liverpool ni Bajcetic querían especular, por lo que el jugador nacido en Vigo -es canterano del Celta, donde jugó su padre- ya se encuentra camino a Austria. Hasta el Salzburgo le quita fichajes a este Barcelona, convertido a día de hoy y gracias a la labor de Laporta, en un auténtico meme.