El Barcelona está firmando un inicio de temporada espectacular en cuanto a juego y resultados en Liga. El cambio de un entrenador en prácticas -solo había dirigido a un equipo en Qatar- Xavi Hernández por Hansi Flick ha sido una auténtica bendición para los azulgranas. El crecimiento táctico y físico del equipo ha sido brutal.
A pesar de tener ahora un técnico de verdad, las dificultades que atraviesa el equipo que preside Joan Laporta son grandes. Económicamente el equipo sigue viviendo en el alambre -no se pudo fichar a Nico Williams a pesar de vender humo durante todo el verano y el único refuerzo, Dani Olmo, tuvo que ser inscrito en la tercera jornada por falta de espacio en el límite salarial, aprovechando una triquiñuela con la lesión de Christensen. Otro punto negro del equipo de la Ciudad Condal son las lesiones. Como si les hubiera mirado un tuerto no paran de caer jugadores. A las lesiones ya conocidas de Frenkie De Jong, Araujo o Gavi, se han unido, en la etapa de Flick, los Christensen, Marc Bernal, Dani Olmo y el último en caer este domingo en el estadio de la Cerámica, ha sido Ter Stegen. La imagen del portero alemán roto tirado en el césped del estadio del Villarreal es demoledora.
Lesió Greu de Ter Stegen: que se'n va del Camp amb evidents mostres de dolor. Luxació de ròtula. pic.twitter.com/BhW9002dAj
— Lluís Puig (@Fisioinquiet) September 22, 2024
El Barcelona ha confirmado este lunes los peores pronósticos: Ter Stegen se destrozó el tendón rotuliano de la rodilla derecha, será operado en las próximas horas y estará unos siete meses en el dique seco.
Una baja capital para un Barcelona cuyo segundo portero, Iñaki Peña, deja muchísimas dudas por su nivel. La idea es acudir al mercado- aunque este cerrado al ser una lesión de larga duración se le permite fichar- pero ojo porque los azulgranas solo pueden incorporar a un portero que se encuentre libre, sin equipo.
Así lo establece el Reglamento Sobre el Estatuto de Transferencia de Jugadores de FIFA. Literalmente recoge dos excepciones a la hora de poder inscribir excepcionalmente a jugadores fuera de los periodos de inscripción. Pero siempre futbolistas no inscritos o "en paro". Bien porque el jugador "haya rescindido unilateralmente su contrato con causa justificada, o cuyo contrato haya sido rescindido unilateralmente por su club sin causa justificada."
O bien porque el jugador se haya quedado sin equipo durante el pasado mercado veraniego: "Se podrá inscribir con el club contratante después de que expire el periodo de inscripción respectivo, al jugador profesional cuyo contrato haya terminado de forma natural o se haya rescindido de mutuo acuerdo antes de que finalice el periodo de inscripción aplicable al club contratante". El Reglamento de la RFEF recoge esta opción para el equipo azulgrana si ahora decide ir al mercado a fichar un portero.
El mercado de porteros sin equipo no es muy goloso. Los principales nombres son los de Keylor Navas (37 años), Jordi Masip (35), Edgar Badía (32 años), Claudio Bravo (41), Jiri Pavlenka (32) o Loris Karius (31).
Navas terminó contrato con el PSG y no ha encontrado nuevo destino. Bravo, el chileno que ya se ha ofrecido al Barcelona, salió del Betis y está sin equipo, Jordi Masip, que salió de la Masía, acabó su periplo con el Real Valladolid y vive en Pucela a la espera de una oferta que le satisfaga. Edgar Badía, uno de los mejores porteros de Segunda, vivió una situación surrealista en el Elche.
Tras ser cedido al Real Zaragoza, los ilicitanos le recuperaron, le cerraron la puerta a un posible regreso a la capital del Ebro, el Zaragoza fichó a dos porteros y finalmente el Elche le rescindió el contrato. Badía es un portero con unos reflejos espectaculares que siempre ha tenido que luchar contra el cliché de su altura.
Los nombres random del mercado de porteros libres lo encabeza Karius y el gigantón internacional checo Jiri Pavlenka que se quedó sin equipo este verano tras su paso por el Werder Bremen.