
En su segundo partido del Open de Australia, Novak Djokovic venció al joven portugués Jaime Faria, de 21 años, en un intenso duelo a cuatro sets (6-1, 6-7(4), 6-3 y 6-2) que se extendió por tres horas. Aunque el marcador favoreció al serbio, Faria mostró su carácter en la pista, sorprendiendo al público con alguna dejada brillante.
Sin embargo, el momento más curioso del partido ocurrió durante el segundo set, cuando el marcador estaba igualado a cinco juegos. Djokovic, visiblemente molesto por las luces de la Rod Laver Arena, detuvo el juego y expresó su incomodidad a Marija Cicak, la juez de silla, pidiéndole que tomara medidas.
La croata realizó una llamada y, tras un gesto que simulaba "cortar", señaló el recinto con círculos en el aire. Segundos después, todas las luces del recinto disminuyeron su intensidad hasta apagarse, lo que permitió al de Belgrado continuar el encuentro más cómodo.
Si lo pide el 24 veces campeón de Grand Slam, se hace 📞
Djokovic protesta por las luces de la Rod Laver... y la juez de silla hace una llamada y se apagan al instante 👌#AusOpen pic.twitter.com/F2m6X6LTVt
— Eurosport.es (@Eurosport_ES) January 15, 2025
Además de las luces, el Novak también tuvo que lidiar con algún que otro espectador. Sus reiteradas reclamaciones le valieron un warning de la juez de silla, añadiendo tensión al encuentro.
Una actuación histórica
Este incidente no empañó su actuación histórica: en su partido 430 de Grand Slam, Nole superó a Roger Federer como el jugador con más encuentros disputados en grandes torneos. Su impresionante balance en estos eventos es de 379 victorias y 51 derrotas, consolidándose como un gigante de este deporte.
Tras el partido, Djokovic fue preguntado sobre Joao Fonseca, una de las revelaciones del torneo, a lo que respondió: "Lo conocí personalmente antes de entrar en pista y no dudé en felicitarle. He seguido de cerca su ascenso y me encanta cómo juega, especialmente, los puntos importantes. Veo algo de mí en su juego, en ese descaro con el que afronta situaciones límite. Tiene todo lo necesario para tener un futuro muy prometedor".
El serbio se enfrentará en tercera ronda al checo Tomas Machac, número 25 del mundo, que viene de batir al estadounidense Reilly Opelka. Este último, verdugo de Novak en Brisbane, añade un punto de interés al próximo enfrentamiento, en el que deberá mantener un nivel de juego alto para avanzar en el torneo.