No es normal, pero por desgracia es cada vez más habitual. No solo está pasando en el Mutua Madrid Open, eso vaya por delante, sin embargo, cada vez es más evidente que el mundo de las apuestas está en muchas ocasiones condicionando y empeorando el espectáculo del tenis a nivel nacional e internacional.
¿Qué es exactamente lo que está pasando? Libertad Digital está siguiendo en primera persona el Mutua Madrid Open y como ya ha pasado en otros torneos alrededor del mundo las apuesta deportivas están generando algo que va más allá del aliento deportivo. Gritos excesivos, ánimos extraños a jugadores que no son nacionales ni son compatriotas de dichos aficionados, enfados si las cosas no van como la gente quiere... Y todo ello relacionado con las apuestas.
El problema es que por momentos y siempre con el móvil en la mano y aplicaciones de apuestas mediante, algunos aficionados, jóvenes y no tan jóvenes, enturbian el espectáculo de los partidos priorizando sus apuestas a lo que está ocurriendo en pista. El respeto ni se ve ni se espera con estos personajes que son cada vez más recurrentes en las gradas.
Un ejemplo lo podemos atestiguar con esta casa como testigo con varios partidos que se juegan en las pistas exteriores de la Caja Mágica. Grupos de jóvenes españoles con el móvil en mano alentando de manera excesiva a un jugador francés. Aficionados quejándose de decisiones arbitrales de manera excesiva cuando, en principio, al que deberían molestar más sería al jugador, no a ellos mismos. Golpes, enfados, aspavientos... Todo ello, repetimos, siempre con el móvil en la mano.
Puede que les parezca algo exagerado, pero no lo es. En el último torneo celebrado en Madrid antes del Mutua, el Challenger celebrado en Casa de Campo, un tenista llegó a enfrentarse a unos aficionados que le martirizaron durante todo el partido.
"¿Estáis contentos? ¿Estáis contentos?... Vosotros, ¿estáis contentos? Os estáis cargando el juego, silbando todo el rato. ¿Quién silbaba? ¡Vosotros silbabais todo el rato! ¡No me importan vuestras apuestas, no me importan!", les gritó el jugador Gombos.
En el Mutua Madrid Open el asunto no está llegando a mayores, pero la preocupación es evidente dentro del mundo tenísticos. Los jugadores piden respeto y los torneos poco pueden hacer para detener esto ya que ni mucho menos depende de ello.