LD (EFE)
Porras calificó el mes de agosto como "atípico", aunque recordó que ya, con anterioridad, se había producido un fenómeno similar, la disminución del 7,1 por ciento en 2000, año, además, "sin ningún acontecimiento especial" que pudiera afectar al sector turístico y provocar la caída de las llegadas extranjeras.
Durante el mes de agosto pasado, el número de turistas (que pernoctan al menos una noche) extranjeros fue de 7,3 millones, mientras que el de visitantes fue de 11,8 millones, un 2,9 por ciento menos que en 2002. En el conjunto de los ocho primeros meses del año, las cifras son positivas, con un crecimiento interanual del 0,5 por ciento en cuanto a turistas (37,1 millones) y del 3,1 por ciento en el caso de visitantes (57,9 millones).
Porras destacó la caída de las entradas por carretera, que fue en agosto del 29,6 por ciento y que no pudo ser compensada por las llegadas de turistas por aeropuerto, que registraron un crecimiento del 8,2 por ciento. Entre los meses de enero y agosto, las llegadas por carretera se han reducido un 12,6 por ciento frente al 6,6 por ciento que se han incrementado las aéreas, crecimiento que, para Porras, significa "una progresiva vuelta a las pautas normales de nuestros movimientos turísticos".
Cataluña fue el primer destino del turismo internacional en España, con el 25,1 por ciento del total y 1,8 millones de turistas, seguida de Baleares, con el 24,4 por ciento, Andalucía, con el 13 por ciento, Canarias, Valencia y Madrid. En Baleares, el número de extranjeros creció en agosto un 2,8 por ciento, gracias al buen comportamiento de sus dos principales mercados emisores, el Reino Unido y Alemania, con incrementos del 0,3 y el 9,7 por ciento respectivamente.
Andalucía, Canarias y Valencia registraron descensos del 2,3, del 2,9 y del 12,3 por ciento respectivamente, mientras que Madrid incrementó en un 1 por ciento el número de turistas, lo que se debe, en parte, al crecimiento de las llegadas de viajeros estadounidenses, cuyo número creció en agosto en España un 43,8 por ciento.
Durante el mes de agosto pasado, el número de turistas (que pernoctan al menos una noche) extranjeros fue de 7,3 millones, mientras que el de visitantes fue de 11,8 millones, un 2,9 por ciento menos que en 2002. En el conjunto de los ocho primeros meses del año, las cifras son positivas, con un crecimiento interanual del 0,5 por ciento en cuanto a turistas (37,1 millones) y del 3,1 por ciento en el caso de visitantes (57,9 millones).
Porras destacó la caída de las entradas por carretera, que fue en agosto del 29,6 por ciento y que no pudo ser compensada por las llegadas de turistas por aeropuerto, que registraron un crecimiento del 8,2 por ciento. Entre los meses de enero y agosto, las llegadas por carretera se han reducido un 12,6 por ciento frente al 6,6 por ciento que se han incrementado las aéreas, crecimiento que, para Porras, significa "una progresiva vuelta a las pautas normales de nuestros movimientos turísticos".
Cataluña fue el primer destino del turismo internacional en España, con el 25,1 por ciento del total y 1,8 millones de turistas, seguida de Baleares, con el 24,4 por ciento, Andalucía, con el 13 por ciento, Canarias, Valencia y Madrid. En Baleares, el número de extranjeros creció en agosto un 2,8 por ciento, gracias al buen comportamiento de sus dos principales mercados emisores, el Reino Unido y Alemania, con incrementos del 0,3 y el 9,7 por ciento respectivamente.
Andalucía, Canarias y Valencia registraron descensos del 2,3, del 2,9 y del 12,3 por ciento respectivamente, mientras que Madrid incrementó en un 1 por ciento el número de turistas, lo que se debe, en parte, al crecimiento de las llegadas de viajeros estadounidenses, cuyo número creció en agosto en España un 43,8 por ciento.