
LD (EFE) Así lo ha afirmado el presidente de la entidad, Francisco González, en una convención con casi 1.800 directivos del grupo, pertenecientes a 27 países, reunidos en Bilbao como paso previo a la Junta de Accionistas que se celebrará este sábado.
En el encuentro, González anunció a los ejecutivos la puesta en marcha de un nuevo plan de transformación con el que se dará más responsabilidad a cada unidad de negocio para mejorar todos sus procedimientos de trabajo y no sólo en los de venta como ocurre actualmente.
Bajo el lema "Adelante es futuro y futuro es transformación", González destacó que los resultados récord conseguidos el año pasado –3.806 millones de euros, un 30,2 por ciento más– son fruto de "una visión acertada", que ha permitido al grupo casi duplicar su valor bursátil en tres años y multiplicar por 2,2 el beneficio atribuido.
González también aseguró a sus directivos que BBVA terminó el ejercicio pasado como el primer banco de la zona euro por eficiencia –46,7 por ciento– y por rentabilidad sobre activos –37 por ciento–, al tiempo que hizo hincapié en que la entidad ha aumentado en más de 13.000 millones su capitalización desde la última Junta, tras subir el 30 por ciento.
Junta de accionistas
El BBVA celebrará este sábado Junta General de Accionistas, una reunión que estará marcada por las retribuciones de los directivos del banco –las percibidas ya y las que se quieren aprobar– y por la indemnización de 122,6 millones de euros que recibirían los tres máximos ejecutivos del banco en caso de despido.
El presidente, Francisco González, llegará a su encuentro anual con los accionistas con el logro de haber conseguido un beneficio récord en 2005 –3.806 millones de euros, un 30,2 por ciento más– y podrá vanagloriarse del aumento del 20,1 por ciento en los dividendos pagados. No obstante, tendrá que explicar a los accionistas las múltiples dificultades y trabas que sufrió el BBVA en Italia, donde el banco tuvo que plegar velas tras el fallido intento de compra de la Banca Nazionale de Lavoro (BNL).
