LD (EFE) En opinión del Instituto de Estudios Económicos, el Gobierno no negoció bien porque no recurrió a las citadas cláusulas, que habrían dado derecho a la recepción de fondos a varias comunidades autónomas que los perderán tras esta negociación.
Durante la presentación del último informe sobre coyuntura económica, el director del IEE, Juan Iranzo, señaló por su parte que los resultados de la negociación demuestran que han prevalecido los intereses nacionales, de forma que los países más ricos han logrado ser los que menos aportan a la ampliación, y "se ha perdido el espíritu europeo", mientras ha crecido el "neonacionalismo y el neoproteccionismo".
Iranzo recomendó al Gobierno que, ante la pérdida de fondos, recurra a la iniciativa privada para las infraestructuras, aunque para ello reclamó un "marco institucional adecuado" con incentivos fiscales a las empresas del sector y con garantías de rentabilidad de sus inversiones.
Por otra parte, el director del IEE volvió a advertir de la "amenaza" que la reforma del Estatuto de Autonomía de Cataluña supone para la economía, pues conllevaría "segmentar enormemente los mercados", además de que generaría "fuertes costes productivos" y supondría "el aumento de la intervención pública en la mayor parte de las actividades". En su opinión, la propuesta estatutaria "se remonta a la época de la autarquía" y generaría un "aislamiento e intervencionismo espectacular de los mercados". En el informe se subraya que esta "amenaza" puede "crear incertidumbre y perjudicar a la inversión extranjera" y ve "especialmente preocupantes" los aspectos del texto que tienen un "fuerte contenido intervencionista".
Durante la presentación del último informe sobre coyuntura económica, el director del IEE, Juan Iranzo, señaló por su parte que los resultados de la negociación demuestran que han prevalecido los intereses nacionales, de forma que los países más ricos han logrado ser los que menos aportan a la ampliación, y "se ha perdido el espíritu europeo", mientras ha crecido el "neonacionalismo y el neoproteccionismo".
Iranzo recomendó al Gobierno que, ante la pérdida de fondos, recurra a la iniciativa privada para las infraestructuras, aunque para ello reclamó un "marco institucional adecuado" con incentivos fiscales a las empresas del sector y con garantías de rentabilidad de sus inversiones.
Por otra parte, el director del IEE volvió a advertir de la "amenaza" que la reforma del Estatuto de Autonomía de Cataluña supone para la economía, pues conllevaría "segmentar enormemente los mercados", además de que generaría "fuertes costes productivos" y supondría "el aumento de la intervención pública en la mayor parte de las actividades". En su opinión, la propuesta estatutaria "se remonta a la época de la autarquía" y generaría un "aislamiento e intervencionismo espectacular de los mercados". En el informe se subraya que esta "amenaza" puede "crear incertidumbre y perjudicar a la inversión extranjera" y ve "especialmente preocupantes" los aspectos del texto que tienen un "fuerte contenido intervencionista".
Recomienda a las empresas que recurran a la deslocalización
Además, el Instituto de Estudios Económicos (IEE) ha recomendado a las empresas españolas que recurran a la deslocalización hacia países con mano de obra más barata, un recurso "inevitable" según este centro para "garantizar la supervivencia" de la industria a largo plazo. En la presentación del último boletín sobre coyuntura del IEE, su director, Juan Iranzo, señaló que defienden el traslado de empresas, que prefirió llamar "relocalización", en la necesidad de que la producción sea más barata y competitiva.
Consideró que países como los del Este de Europa pueden ser un "buen complemento" a la viabilidad de las empresas españolas. Como ejemplo, señaló que buena parte de las empresas del sector del juguete que han permanecido en la Comunidad Valenciana han quebrado, cuando lo adecuado sería mantener el diseño y la comercialización en la central española y trasladar la base de la producción a países como China, aunque dejar una cadena productiva en España que fabrique los juguetes cuando haya picos de demanda.
Consideró que países como los del Este de Europa pueden ser un "buen complemento" a la viabilidad de las empresas españolas. Como ejemplo, señaló que buena parte de las empresas del sector del juguete que han permanecido en la Comunidad Valenciana han quebrado, cuando lo adecuado sería mantener el diseño y la comercialización en la central española y trasladar la base de la producción a países como China, aunque dejar una cadena productiva en España que fabrique los juguetes cuando haya picos de demanda.
Otras reformas necesarias
Tanto Iranzo como el responsable de Análisis del IEE, Gregorio Izquierdo, defendieron por otra parte que la negociación salarial del año que viene no tenga en cuenta, en la subida de los sueldos, la alta tasa de inflación con la que se cerrará 2005, y se base en la productividad de cada empresa o, en cualquier caso, en el objetivo de inflación que marca el Banco Central Europeo (2 por ciento). De no ser así, advirtió Izquierdo, "se puede empezar a agotar la capacidad de crecimiento de empleo" en la economía española.
Además instó al Ejecutivo a que la bajada del tipo del Impuesto de Sociedades sea efectiva a partir del próximo año, y no gradual en los ejercicios venideros como defiende el Gobierno. La flexibilización de los mercados fue otra de las medidas defendidas por el IEE que, en cuanto al laboral, aboga por que se generalice la indemnización por despido de 33 días a "todos los contratos".
Otra liberalización defendida es la del suelo, que en opinión de Iranzo serviría para "moderar el crecimiento de la vivienda", y consideró que la propuesta de la nueva Ley del Suelo del Gobierno, que contiene la reserva de superficie para viviendas de protección oficial, es "contraria a la lógica". El director del IEE también reclamó una mejora de la eficiencia en el mercado de alquiler, y calificó de "inadecuada" la creación de las oficinas públicas de alquiler, que en su opinión crean "distorsiones en el mercado".
Tanto Iranzo como el responsable de Análisis del IEE, Gregorio Izquierdo, defendieron por otra parte que la negociación salarial del año que viene no tenga en cuenta, en la subida de los sueldos, la alta tasa de inflación con la que se cerrará 2005, y se base en la productividad de cada empresa o, en cualquier caso, en el objetivo de inflación que marca el Banco Central Europeo (2 por ciento). De no ser así, advirtió Izquierdo, "se puede empezar a agotar la capacidad de crecimiento de empleo" en la economía española.
Además instó al Ejecutivo a que la bajada del tipo del Impuesto de Sociedades sea efectiva a partir del próximo año, y no gradual en los ejercicios venideros como defiende el Gobierno. La flexibilización de los mercados fue otra de las medidas defendidas por el IEE que, en cuanto al laboral, aboga por que se generalice la indemnización por despido de 33 días a "todos los contratos".
Otra liberalización defendida es la del suelo, que en opinión de Iranzo serviría para "moderar el crecimiento de la vivienda", y consideró que la propuesta de la nueva Ley del Suelo del Gobierno, que contiene la reserva de superficie para viviendas de protección oficial, es "contraria a la lógica". El director del IEE también reclamó una mejora de la eficiencia en el mercado de alquiler, y calificó de "inadecuada" la creación de las oficinas públicas de alquiler, que en su opinión crean "distorsiones en el mercado".