L D (EFE)
Según ha explicado el director general de Consumo, Josep Tous, esta medida se empezará a aplicar en septiembre en Cataluña, la primera comunidad autónoma en adoptar una medida de este tipo, y su incumplimiento dará lugar a sanciones. La obligación de entregar al consumidor, antes de la firma del contrato, de una copia del mismo en una letra de un grosor mínimo de 2,5 milímetros surge a raíz de una campaña de inspección de créditos al consumo llevada a cabo por el Instituto Catalán del Consumo, en la que se detectaron muchas reclamaciones de este tipo.
Durante la campaña se han registrado contratos con hojas escritas con una letra de menos de medio milímetro, en las que solo se podía leer el contenido tras aumentar tres veces su tamaño en una fotocopia. Según un informe del Colegio de Opticos, encargado por el Instituto Catalán del Consumo, el tamaño de letra legible para la población media es de 2,5 milímetros.
La Generalitat tiene previsto ampliar esta normativa a otros sectores, pero ha optado por iniciarla en los contratos con bancos y aseguradoras porque, según Tous, "son los actos de consumo más importantes que realiza una persona durante su vida" tanto a nivel económico como de duración. La orden del Departamento de Trabajo, Industria, Comercio y Turismo, que en estos momentos se encuentra en consulta pública, obligará además a que la copia que deberán entregar estas entidades tenga una tipología uniforme, un contraste adecuado y, como mínimo, esté escrito en catalán.
Durante la campaña se han registrado contratos con hojas escritas con una letra de menos de medio milímetro, en las que solo se podía leer el contenido tras aumentar tres veces su tamaño en una fotocopia. Según un informe del Colegio de Opticos, encargado por el Instituto Catalán del Consumo, el tamaño de letra legible para la población media es de 2,5 milímetros.
La Generalitat tiene previsto ampliar esta normativa a otros sectores, pero ha optado por iniciarla en los contratos con bancos y aseguradoras porque, según Tous, "son los actos de consumo más importantes que realiza una persona durante su vida" tanto a nivel económico como de duración. La orden del Departamento de Trabajo, Industria, Comercio y Turismo, que en estos momentos se encuentra en consulta pública, obligará además a que la copia que deberán entregar estas entidades tenga una tipología uniforme, un contraste adecuado y, como mínimo, esté escrito en catalán.
