El Ministerio del Interior ha movilizado en las últimas horas a casi 24.000 efectivos de las Fuerzas de Seguridad para intentar garantizar que la huelga en el transporte no afecte a los suministros que llegan a los mercados españoles y no haya escasez de productos de primera necesidad. Ha sacado a la calle con esta misión, exactamente, a 23.598 agentes, de los que 16.476 son de la plantilla de la Guardia Civil y 7.122 de la de la Policía Nacional.
La misión encomendada a estos agentes es triple. En primer lugar, escoltar convoyes de suministros para que puedan llegar sin incidencias hasta su destino, sin verse afectado por posibles boicots. En segundo lugar, patrullar y dotar de seguridad a los nodos de transportes de mercancías y a los principales centros logísticos. La tercera y última es prevenir y actuar contra los posibles piquetes violentos, evitando que actúen contra los trabajadores que no respaldan la huelga.
El departamento de Fernando Grande Marlaska ha constituido asimismo un Centro de Seguimiento y Coordinación, que se reúne para seguir la evolución de la situación hasta tres veces al día (a las 9.00 horas, a las 14.00 horas y a las 19.30 horas). En el mismo participan mandos de las Fuerzas de Seguridad del Estado, de las Policía autonómicas, así como representantes de los ministerios de Transición Ecológica, Política Territorial y Transportes.