La presidenta madrileña se ha volcado con las elecciones catalanas y este lunes acudió a Barcelona. Su primera parada fue en Sarriá, donde se dio un paseo con el candidato del PP a la presidencia de la Generalidad, Alejandro Fernández, y junto a la cabeza de lista del partido a las elecciones europeas, Dolors Montserrat.
"Queremos a Ayuso en Cataluña", contó el popular Daniel Sirera que le dijeron a la presidenta durante el recorrido. "Volver a Cataluña es siempre estar en casa", dijo ella después, que recordó que ya son "diez o doce" las veces que ha visitado esta comunidad autónoma. "Y cada día me siento mejor", confesó. Y es que avisó de que uno de los "compromisos" que ha "adquirido" mientras esté en política es "estar en Cataluña siempre". De esta manera, la jefa del Ejecutivo regional trata de revertir uno de los errores que se le achacan al PP mientras ha estado en el Gobierno y es no ocuparse lo suficiente de esta autonomía, desentenderse en favor del nacionalismo.
Después de un encuentro con el gremio de la restauración, Isabel Díaz Ayuso acudió a una abarrotada plaza Artós de la Ciudad Condal. "Bienvenida, presidenta. Esta es tu casa", le dijo Fernández. "Hay que ser valientes y decir la verdad: hace décadas Cataluña hacía las mejor las cosas que Madrid y hoy Madrid hace las cosas mejor que Cataluña", reconoció el candidato.
Y sobre esto giró el mitin de ambos: en ser claros, en decir la verdad. Así que la presidenta arrancó su intervención de forma nítida, directa, sin rodeos: "Hay que revertir el negocio corrupto que representa el independentismo. Hay que cortar el grifo ya: del victimismo, de la lloriquería, de la mentira". Ayuso lamentó que los gobiernos independentistas de Cataluña hayan fomentado el enfrentamiento de Cataluña con Madrid y alertó sobre sus políticas, que alejan la inversión y hunden la economía.
Están "ensimismados" en "fabricar identidades". "Cuanto mejor les va a los separatistas, peor les va a los catalanes, excepto a aquellos que viven pegados al poder. ¡Basta ya de dirigir a la sociedad catalana, basta ya!", exclamó entre el aplauso de los congregados.
Pero Ayuso cargó especialmente las tintas contra el candidato socialista, Salvador Illa. "En Madrid le conocemos bien", advirtió sobre el exministro de Sanidad que más duramente confrontó contra la Comunidad de Madrid en lo peor de la pandemia. "No es constitucionalista y, por supuesto, no es liberal, es ese caballo de Troya del independentismo xenófobo y frentista", dijo y recordó cómo el independentismo, "cuando estaba en las horas más bajas", los socialistas lo han "multiplicado por siete votos".
"El padrino de Illa, Zapatero, dice que el reconocimiento nacional de Cataluña cabe la Constitución. Claro, ¿en qué Constitución? En la Constitución Bolivariana de la Moncloa que está alimentando", dijo sobre las últimas declaraciones del expresidente del Gobierno, principal valedor del sanchismo. "Es una Constitución a la carta, cada día un artículo: ahora vamos a cerrar los negocios, ahora la amnistía es legal y Puigdemont, como Otegui, como toda esta gente son gente de paz, gente de prosperidad y de convivencia, van interpretando la Constitución de todos". Según Ayuso, "no nos podemos acostumbrar porque este pitorreo se tiene que acabar.
La presidenta también quiso dejar claro que esto "no va solo de gestión, va de valores y de cómo encarar las dificultades y el futuro sin pinganillos, sin mentiras, respetando la Constitución, el consenso, la convivencia, las instituciones, la España real, la Cataluña libre, abierta y plural".
Así las cosas, Ayuso lanzó una última petición y es "no dividir el voto" en estas elecciones, en clara alusión a Vox y Ciudadanos. "El Partido Popular en estas elecciones tiene esa llave fundamental, es ese contrapeso más necesario que nunca. No dividamos el voto este domingo". Y es que por haberlo hecho el pasado 23 de julio "están desguazando a España por siete escaños". Para la dirigente madrileña hay dos únicas opciones este domingo: "O elegimos independentismo, donde siempre está el PSOE con sus viejos amigos terruñeros, que se llevan todos de fábula, o la Cataluña libre y próspera de todos".