Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM) celebra que el próximo 4 de febrero, la tuitera y colaboradora de medios como El Diario y Público, conocida como Barbijaputa, se sentará en el banquillo de los acusados "por delitos de provocación a la discriminación y al odio, así como por difamación o lesión a la dignidad del colectivo judío, entre otros", según ha señalado la organización en un comunicado.
"Barbijaputa, con cientos de miles de seguidores en la red social X, públicamente fomentó, promovió e incitó el odio contra la colectividad judía y judía-israelí y humilló a las víctimas del Holocausto, trivializó gravemente dicho genocidio, justificó el terrorismo sufrido por la colectividad judía-israelí, y lesionó, en general, la dignidad de los miembros de dicha colectividad aprovechando su popularidad personal y la de sus cuentas en X", ha denunciado ACOM.
La organización también recuerda que las declaraciones antisemitas de la tuitera fueron difundidas por El Diario, dirigido por Ignacio Escolar: "Desde dicho medio se le ofreció durante años un altavoz para su violento veneno".
Entre las expresiones de la acusada, publicadas de forma recurrente, figuran afirmaciones como:
"Hitler era un cabrón por cargarse judíos y un cutre por no acabar el trabajo. Ahora mira lo que pasa"
"Los que más me gustaban eran los judíos. Muy fan de los judíos. Si estaban vivos no tanto"
"Por cierto, ¿sabéis quién mató sólo a 6 millones de judíos cuando podría haberlos matado a todos? EXACTO, HITLER"
"Siguiendo con lo de antes, ¿qué sería más apropiado: eliminar todo Israel o sólo a los judíos?"
"Yo voto por envenenar todas las kosher"
"Me metí con los judíos indiscriminadamente y planeé un envenenamiento masivo de koshers. Ni un unfollow"
"La violencia no arregla nada, excepto si hablamos de nazis, que tampoco, pero mira, tampoco no hay que ser eficientes todo el rato".
Contratos con instituciones públicas
Además de recibir el altavoz y protección por parte del diario de Ignacio Escolar, ACOM denuncia que Barbijaputa también "ha tenido acceso abierto" a contratos con instituciones públicas como el Gobierno balear de Francina Armengol o el ayuntamiento de Madrid de Manuela Carmena, que la contrataron pese a conocer sus declaraciones antisemitas.
Pese a estar acusada de un delito de odio, Barbijaputa podría escudarse en la proposición de ley que ha registrado el PSOE precisamente este viernes para suprimir el artículo 525 del Código Penal, de ofensas a los sentimientos religiosos. En opinión del portavoz del grupo socialista, Patxi López, este delito es utilizado "permanentemente por organizaciones ultras y fundamentalistas para perseguir a artistas, a activistas, a representantes electos, haciéndoles pasar por procesos penales que son muy costosos a nivel económico, pero sobre todo a nivel personal, sin fundamento alguno".
Sin embargo, en opinión de ACOM, este tipo de acciones explican el "preocupante incremento del antisemitismo en Europa y en la propia España". Además, insisten en que "se trata por tanto de desgarrar la manta de impunidad y desenmascarar la complicidad bien alimentada de recursos públicos y privados que ha estado beneficiando al rabioso antisemitismo propagado por personajes y medios de la izquierda española, de los que Barbijaputa e Ignacio Escolar son un lamentable ejemplo".