El ejercicio, diseñado para evaluar y mejorar los protocolos de emergencia en caso de desastre, ha reunido a diversos equipos de rescate, incluyendo a bomberos, servicios de emergencia y personal especializado en avalanchas.
Durante el simulacro, los equipos de rescate han simulado la búsqueda y recuperación de las personas atrapadas bajo la nieve, empleando técnicas y equipos avanzados para garantizar la seguridad y eficacia de las operaciones en situaciones extremas. Este tipo de entrenamientos son fundamentales para mantener la preparación ante posibles incidentes en zonas de alta montaña, donde las avalanchas representan un riesgo constante para esquiadores y excursionistas.

