Doce años después del accidente del tren Alvia en Angrois, la plataforma de víctimas ha denunciado este jueves en Santiago que "el Estado no responde" ni ha asumido responsabilidad política alguna por un siniestro que dejó 80 muertos y 144 heridos. El colectivo insiste en que la tragedia fue evitable y señala decisiones políticas y recortes en seguridad como origen del siniestro.
Pardo de Vera, en el punto de mira
En su comparecencia ante los medios, Jesús Domínguez, portavoz de la plataforma, ha cuestionado el papel de Isabel Pardo de Vera, directora de obra en los accesos a Santiago en el momento del accidente y actualmente imputada en otra causa por corrupción. Las víctimas recuerdan que el sistema de seguridad ERTMS, que habría evitado el accidente, fue suprimido con un recorte de 19 millones de euros bajo el mandato del entonces ministro de Fomento, José Blanco (PSOE).
"No sabemos en qué se gastaron esos millones. La pregunta es si la corrupción, además de llevarse el dinero, también mata", ha afirmado Domínguez.
En su intervención, el portavoz ha criticado que la nueva estación de Santiago ha sido inaugurada sin un solo recuerdo ni placa en memoria de los fallecidos, y ha cargado contra el actual ministro de Transportes, Óscar Puente, por negarse a reunirse con ellos. "Pasará a la historia como el único ministro que no ha querido escucharnos", ha asegurado.
La sentencia judicial desmonta la versión oficial
El pasado 26 de julio de 2024, el Juzgado de lo Penal condenó al exdirector de seguridad de Adif, Andrés Cortabitarte, por 79 delitos de homicidio y 144 de lesiones por imprudencia profesional grave. La sentencia subraya que fue "incomprensible" dejar sin protección técnica un tramo de alta peligrosidad, como era la curva de A Grandeira.
El fallo da la razón a las víctimas al afirmar que la tragedia fue consecuencia de decisiones técnicas y políticas erróneas, y no solo de un fallo humano del maquinista, como sostuvo la investigación oficial. La plataforma insiste en que el accidente no fue un error aislado, sino el resultado de recortes, prisas y negligencia.
Críticas a la investigación del Gobierno
La plataforma insiste en que la investigación de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF), impulsada por el propio Ministerio, fue parcial y diseñada para exculpar a Renfe y Adif. Recuerdan que culpó únicamente al maquinista, sin analizar las causas estructurales.
Ante esta situación, las víctimas han acudido al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que estudia si España vulneró el derecho a una investigación independiente, tal y como obliga la normativa comunitaria. Según la plataforma, una resolución favorable podría obligar al Estado a repetir toda la investigación oficial.
Doce años de lucha sin respuestas políticas
El comunicado leído este jueves denuncia que ni el PSOE ni el PP han querido asumir responsabilidades, y critica el comportamiento de cinco gobiernos y cinco ministros. El colectivo exige una disculpa pública al más alto nivel, incluyendo al presidente Pedro Sánchez, al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y a los exministros José Blanco y Ana Pastor.
"Han sido doce años de desprecio institucional, de mentiras y encubrimiento. Nos enfrentamos sin medios al aparato del Estado y la justicia nos ha dado la razón", concluyen.
Reivindican que todo lo conseguido ha sido fruto del esfuerzo personal de las víctimas y de ciudadanos comprometidos que les apoyaron, sin apoyo oficial ni cobertura institucional. Subrayan que la lucha no termina con la sentencia penal, ya que queda pendiente una respuesta política y una investigación técnica objetiva.
El Parlamento Europeo, vía de presión
La eurodiputada del BNG, Ana Miranda, ha anunciado este jueves la presentación de una denuncia formal ante la Comisión Europea, solicitando que se exija al Gobierno de España una investigación conforme a los estándares europeos de seguridad ferroviaria.
Miranda, que ha acompañado a las víctimas durante años en Bruselas, se ha comprometido a seguir trabajando para que "se conozca toda la verdad del accidente y se depuren todas las responsabilidades".
Testimonios de supervivientes: "Tuvimos que mover cadáveres para sacar heridos"
En paralelo al acto institucional, la plataforma ha recordado los testimonios de algunos supervivientes recogidos tras el accidente. Vecinos como Ricardo Martínez narraron cómo se vieron obligados a levantar cuerpos para rescatar a los heridos entre los vagones.
Otros pasajeros describieron el ruido, la polvareda, los gritos y el caos tras el descarrilamiento. "Dimos muchas vueltas de campana", relató uno de ellos. Otro explicó que el tren "se volcó de lado y se arrastró contra el hormigón", mientras los asientos y maletas caían sobre los viajeros.
Este año, la plataforma ha decidido no celebrar el acto tradicional en la curva de A Grandeira, por el peso emocional que supone. En su lugar, organizaron un encuentro privado este miércoles en el Pazo do Faramello.