Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta del Gobierno: "Cuando una parte del territorio de un Estado miembro deje de ser parte de ese Estado, por ejemplo, cuando ese territorio se convierta en un Estado independiente, los tratados no serán de aplicación a ese territorio. En otras palabras, la nueva región independiente debería, por la circunstancia o por el hecho de su independencia, se convertiría en un tercer Estado respecto de la Unión y de los tratados y dejarían, por lo tanto, de aplicarse en ese territorio".
"Un Estado europeo debería, de acuerdo con el artículo 49 del Tratado de la Unión Europea, cualquier Estado europeo en respuesta a la ampliación del artículo 61, podría intentar convertirse o solicitar la aplicación del tratado para convertirse en un Estado miembro. Pero esa aplicación requiere, si es aprobada por el Consejo unánimente, una negociación o un acuerdo entre el Estado de aplicación y el resto de los Estados miembros sobre las condiciones de admisión y sobre el cumplimiento de los tratados bajo cuya admisión se solicita. Este acuerdo tiene que ser ratificado por los Estados miembros y por el Estado al que le es de aplicación".
"Como tengo la sensación de que hay ciero apresuramiento a la hora de plantear iniciativas de esta naturaleza como consecuencia de ciertos acontecimientos no sé si suficientemente reposados y valorados, yo espero que ningún Estado, serían muchos los Estados a opinar sobre esto con sus particulares circunstancias internas no se llega a producir ninguna circunstancia como ésta. Por tanto, yo creo que es bueno que por parte de algunos se anlice de verdad las implicaciones económicas, sociales pero también legales y europeas de lo que están proponiendo".
"El señor Durán i Lleida le ha dicho a los catalanes lo que hay y es que, por mucho que él también reclame posiciones independentistas o separatistas, por lo menos ha venido a reconocer la verdad, que saldrían de la Unión Europea y se tendría que iniciar de nuevo todo el proceso para su incorporación".
