Menú

Guillermo Díaz (Cs), el azote del PSOE por su pacto con Bildu

El diputado recibe a Libertad Digital después de su duro enfrentamiento con Odón Elorza en defensa de las víctimas de ETA.

El diputado recibe a Libertad Digital después de su duro enfrentamiento con Odón Elorza en defensa de las víctimas de ETA.
Guillermo Díaz, diputado de Ciudadanos. | David Alonso Rincón

"Yo, entre el partido de Miguel Ángel Blanco y el partido de Otegi, siempre con el de Miguel Ángel Blanco; yo, entre el partido de Ortega Lara y el partido de Otegi, siempre con el partido de Ortega Lara; yo, entre el partido de los compañeros de Maite Pagaza y el partido de Otegi, siempre con los compañeros de Maite Pagaza". Con esta demoledora frase, el diputado de Cs, Guillermo Díaz, rompió esta semana una lanza a favor de las víctimas del terrorismo y otra a favor de la convergencia entre partidos nacionales para la defensa de la libertad.

El Congreso de los Diputados, convertido desde hace tiempo en un plató de televisión donde priman los enfrentamientos a cara de perro y las malas formas, se transformó por un momento en un lugar de concordia entre similares y confrontación de ideas entre adversarios, rememorando viejos tiempos.

Su enfrentamiento con el diputado del PSOE, Odón Elorza, ha situado a Guillermo Díaz en el foco mediático pero, en realidad, forma parte del Parlamento desde el año 2016, cuando Albert Rivera lideraba Cs. De él tiene una gran opinión, igual que de su actual jefa, Inés Arrimadas. Cuando se produce la conversación con Libertad Digital, la líder de Cs acaba de protagonizar un acto con Cayetana Álvarez de Toledo en Barcelona.

"Cayetana es una gran escritora, me he leído su libro y está muy bien escrito", asegura el diputado sobre la obra de la exportavoz parlamentaria del PP, con la que no comparte la necesidad de "integrar" a quienes representan el constitucionalismo. "Soy más partidario de tener puntos de colaboración, objetivos comunes", asegura.

guillermo-diaz-ciudadanos-entrevista-congreso-021221--8.jpg
Guillermo Díaz, en Madrid. | David Alonso Rincón.

"De lo que seguro no soy partidario es de contratar a alguien para que te destruya", afirma en referencia al secretario general del PP, Teodoro García Egea, y su mano derecha, Fran Hervías, antes en Cs. "Es algo que ella (Cayetana) nunca haría porque tiene un armazón intelectual", afirma Díaz, para quien la política actual tiene un problema: "El que tiene una idea, el que tiene bagaje intelectual, es apartado por los mediocres, lo tapan por miedo", asegura en referencia a la cúpula del PP y, también, a Pedro Sánchez, al que acusa de haber acabado con el socialismo español.

"El gran drama de España es que no existe la izquierda patriótica, que es necesaria. La izquierda se ha vendido al nacionalismo, que representa el privilegio territorial. La izquierda está permitiendo que los derechos emanen de las piedras, no de las leyes, y eso genera una gran desigualdad", explica.

Conocedor de ETA por partida doble

Guillermo Díaz nació en Melilla en 1978, aunque ha vivido en Pamplona, Bilbao, Badajoz y, ahora, en Málaga, donde echó raíces junto a su mujer, Laura, enfermera de profesión y con la que ha conocido de primera mano qué es y cómo afecta la pandemia del coronavirus. Con ella tiene un hijo, de nombre Hernán, en honor al conquistador de México, Hernán Cortés, y al capitán del ejército de los Reyes Católicos, Hernán Pérez del Pulgar.

guillermo-diaz-iron-maiden.jpg

Uno de sus excompañeros en Cs, y amigo, Juan Carlos Girauta, se deshace en elogios hacia "Willy": "Es un hombre formidable, extraordinario". De él destaca que "lee mucho y es muy culto, a pesar de la imagen jovial y cercana que transmite". Ejemplo de ello son sus gustos musicales: fan del heavy metal, Iron Maiden es su grupo favorito.

Le gustan también los cómics de superhéores y practica el mentalismo y el ilusionismo, como recuerda el propio Girauta, que le acompañó en varias ocasiones a tiendas de magia para "echarse unas risas". Pero, sobre todo, afirma que "su fondo moral e intelectual está muy por encima de la media de los diputados del Congreso".

El nacimiento de Cs

Díaz se afilió a Cs casi desde su nacimiento en 2014, admirador como era de sus fundadores, Arcadi Espada, Albert Boadella y Félix de Azúa. Una decisión que le costó un disgusto a su abuela, una de las personas que colaboró para fundar Alianza Popular en Málaga y que le afilió al PP siendo él muy joven.

Licenciado en Derecho por la Universidad de Málaga, nunca ha ejercido como abogado. Se declara periodista e historiador frustrado, aunque se siente orgulloso de haber estudiado leyes por influencia de su padre, Coronel del Ejército y licenciado también en Derecho.

De él habló esta semana en la tribuna de oradores del Congreso para, a través de su relato, recordar qué es ETA y quiénes son sus víctimas, especialmente las que se cobró en la década de los 80, los años más duros del terrorismo en España.

Cuando el nombre de su padre y su dirección aparecieron en los papeles de la banda terrorista, Guillermo Díaz y su madre tuvieron que mudarse de Pamplona a Madrid para evitar riesgos. Ella, psicóloga clínica, también conoció de cerca el horror de aquellos años por haber tratado a muchas víctimas del terrorismo.

"Recurrir a mi experiencia para responder a Elorza no significa que admita el marco de que sólo puede hablar de ETA quien lo ha vivido. ETA actuaba contra España y contra la vida", defiende en conversación con Libertad Digital.

guillermo-diaz-ciudadanos-entrevista-congreso-021221--1.jpg
El diputado de Ciudadanos, en el Congreso. | David Alonso Rincón.

Un lector empedernido

Antes de entrar en política, Díaz fue gerente de una conocida multinacional de la industria cinematográfica y trabajó en conocidas exhibiciones del sector. Esta profesión le permite cultivar una de sus grandes aficiones: el cine. El director José Luis Garci es uno de sus grandes referentes, junto al periodista y escritor Juan Antonio Cebrián, que presentaba el programa de radio La Rosa de los Vientos.

A este último comenzó a escucharle a los 18 años por padecer entonces algunos problemas de insomnio. "Si quitas de mi vida a Garci y a Cebrián, perdería un trozo muy importante de lo que soy hoy en día", asegura. Su admiración por Cebrián y sus colaboradores, Jesús Callejo y Carlos Canales, le animó a convertirse en un lector empedernido para "poder tener una conversación tan interesante como ellos".

La lectura de los libros de Cebrián, a la que añadía después la bibliografía que empleaba, le han convertido en un experto en Historia militar. Ambas aficiones le han llevado a escribir dos obras: Hipatia de Alejandría y Las mentiras del cine bélico.

La casualidad quiso que Callejo y Canales acabaran convirtiéndose en sus grandes amigos. Con ellos colabora en un programa de radio heredero de Cebrián, La Escóbula de la Brújula. Liberales convencidos, se llaman a sí mismos en tono de humor Los amarillos viejos, en honor a uno de los Tercios de España.

"El liberalismo es la imposición de la razón sobre los instintos, es la autoimposición de límites para garantizar la libertad de todos", defiende Díaz, que admite la dificultad de ser coherente y defender esta ideología, a pesar de lo cual, nunca renunciará a ello.

guillermo-diaz-ciudadanos-entrevista-congreso-021221--6.jpg
Guillermo Díaz, frente al Congreso. | David Alonso Rincón.

Temas

En España

    0
    comentarios