Anna Grau, diputada de Ciudadanos en el Parlamento de Cataluña, ha comentado en Es la Mañana de Federico en esRadio el boicot independista en el minuto de silencio en el homenaje de las víctimas del ataque terrorista del 17-A en Barcelona. El que debería ser un día sobrio y emotivo para Cataluña se vio empañado por los gritos y abucheos de los independentistas, Grau señala que "nada más llegar ya se escuchaban gritos y pancartas" y asegura que "lo de ayer excedió toda medida y, por desgracia, esto no es nuevo".
Los actos del homenaje fueron divididos en dos por las crispaciones políticas y Anna Grau asegura que "algunos nos hemos tenido que dividir". El primero realizado por el Ayuntamiento de Ada Colau, donde tuvo lugar el incidente, y el segundo por la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas, que estuvo marcado por "la ausencia de los independistas, la versión Catalana de Podemos y el Partido Socialista".
La diputada de Ciudadanos ha expresado que "la responsable de que la situación se excediera en el homenaje es Laura Borrás, que ha decido convertir todo lo que se le ponga por delante en un aquelarre" y señala que "la actitud de Laura Borrás horrorizó a los suyos propios, la veían un poco como la niña del exorcista".
En el caso de las declaraciones del ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, que aseguró que los abucheos no se escuchaban, Anna Grau también ha querido mencionar que "no diga que no se escuchaban los abucheos porque se clavaban como puñales en el alma".
Sobre el impago de las indemnizaciones a muchas de las víctimas ha destacado "la mala gestión policial por parte de los Mossos provocó que se dificultara mucho la situación" y asegura que "esto es un error interesado" ya que "cuando se reconoce a una víctima hay que pagarle una cantidad de dinero".
"El independentismo catalán no es una opción política, es una enfermedad social", ya que, "una cosa es que tu defiendas una ideología extrema y otra que te conviertas en un sociópata con carnet", ha señalado.