El PSOE había ideado una campaña basada en una catarata de medidas (vivienda, educación, sequía y la reunión con Biden) pero todo saltó por los aires cuando se conoció el informe de Covite que denunciaba que 44 terroristas estaban en las listas de Bildu.
En el Gobierno reconocen cierta incomodidad, porque no pueden vender sus medidas electoralistas. "Dificulta hablar de otros temas", añaden algunos altos cargos de Moncloa aunque, tras los últimos trackings, no creen que les vaya a pasarles especial factura el 28-M.
"Ya sucedió en 2007", afirman algunos estrategas socialistas y recuerdan que durante la campaña de las municipales y autonómicas de aquel año, uno de los temas centrales fue la huelga de hambre del etarra Iñaki de Juana Chaos. En el PSOE rememoran que en aquellas elecciones no hubo cambios esenciales en el panorama político, incluso consiguieron arañar las Islas Baleares al PP y mantener Castilla-La Mancha pese que José María Barreda había sustituido al histórico José Bono.
Sube la izquierda y Vox
Los últimos trackings que maneja el PSOE, y que fueron analizados este pasado lunes en los maitines que preside en la Moncloa Pedro Sánchez, muestran que la "curva ascendente del PSOE es sólida" y que el escándalo del socio parlamentario del Gobierno "no desmoviliza" a la izquierda, dicen.
"Cohesiona al electorado progresista", tercian otras voces próximas al presidente del Gobierno que remarcan que también está subiendo Podemos en algunas autonomías como Madrid, Extremadura o Comunidad Valenciana.
Por el contrario, el principal trasvase de votos se está registrando en la derecha. Ahí, el PP estaría cediendo terreno frente a Vox. "¿Estáis escuchando a Vox con este tema? No, porque no lo necesitan", advierten los más próximos a Sánchez y que creen que el PP "se está pasando de frenada". "Es muy burdo", sentencian otras voces sobre la estrategia de poner el foco en Bildu.
La Rioja, en peligro
En el PSOE sólo reconocen que hay una plaza donde está difícil: La Rioja, donde Concha Andreu llegó al poder tras décadas de Gobiernos del PP. También afirman que "empujarán" para que Emiliano García Page obtenga una mayoría absoluta en Castilla-La Mancha aunque la horquilla es bastante justa. De ahí que se le permitan "ciertas licencias" como pedir en un mitin ante Sánchez que "con los asesinos de ETA, ni a la vuelta de la esquina".
En Ferraz lo justifican porque el barón castellano manchego supera el 40% de intención de voto algo que, según reconocen, no puede alcanzar el PSOE por sí solo en esa comunidad. Otro barón díscolo es el aragonés Javier Lambán. Sin embargo, en la dirección federal detectan que el voto en esa comunidad es "puro PSOE" y descartan que este jueves, durante el mitin conjunto con Sánchez, vaya a mencionar el asunto de Bildu.
Más fáciles estarían las cosas en Extremadura donde Guillermo Fernández Vara tendría el colchón de Unidas Podemos. La formación morada, en coalición con IU, está subiendo y podría tener hasta 4 escaños.
En la Comunidad Valenciana, los socialistas creen que la izquierda va a tener un resultado más abultado que el que pronostican las encuestas. Otra cosa es el Ayuntamiento, aunque siguen creyendo que "tienen opciones".
En el PSOE también "tiene buenas sensaciones" en Barcelona, Zaragoza o Málaga. Incluso se atreven a pronosticar que serán primera fuerza en Ceuta, debido a la división de la derecha, aunque aventuran que no gobernarán en la ciudad autónoma.