Tras cerrar el plazo para solicitar el voto por correo de cara a las elecciones del próximo 23 de julio, Correos hace balance este jueves y las cifras son demoledoras. En total, se han recibido 2.622.808 solicitudes, récord absoluto desde que hay registros de este sistema. Esto supone un 94,71% más que en los comicios de 2019 y un incremento del 80,45% respecto a los de 2016, que hasta ahora marcaban el récord histórico. Sin embargo, lo más preocupante es cuántas documentaciones electorales quedan aun por entregar: según la empresa pública, hasta 737.585.
Hace siete años, Correos recibió 1.452.988 solicitudes, un millón menos que en esta convocatoria. Y eso a pesar de que, por aquel entonces, las elecciones también se celebraron a las puertas del verano, concretamente, un 26 de junio. Además, las cifras son también mucho más altas que en los últimos comicios, ya que en abril de 2019 el número de electores que se decantaron por este sistema fueron 1,2 millones, cifra que se redujo a algo menos de un millón en la repetición electoral del 10 de noviembre.
Lo que no ha confirmado Correos es cuántos ciudadanos todavía no han recibido la documentación necesaria para votar, la gran preocupación de muchos españoles que temen tener que irse de vacaciones sin haber depositado su papeleta. Entre graves denuncias de los sindicatos y el clamor ciudadano de quienes ven en riesgo su derecho a voto, Correos ha decidido ampliar horarios en el último momento, admitiendo el caos que la izquierda niega.
Según ha confirmado la empresa pública, este fin de semana abrirá todas sus oficinas en horario de 09:00 a 21:00 horas en Madrid, Barcelona y varias ciudades turísticas, y no descarta ampliar el plazo para el depósito del sufragio, fijado hasta el momento para el jueves 20 de julio.
A priori, la documentación necesaria para votar -las papeletas y el certificado de inscripción en el censo- debería llegar a la dirección que los votantes han elegido antes de este domingo 16 de julio. Según Correos, el cartero hará dos intentos para entregar la documentación, que debe recoger la persona a la que va dirigida acreditándolo mediante DNI. Si no la encuentra en en la dirección en la se solicitó el envío, dejará un aviso de llegada en el buzón para que el votante la recoja en su oficina postal más cercana.