El repunte de asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o exparejas este verano ha obligado al Ministerio de Igualdad a convocar un nuevo comité de crisis para tratar de poner freno a una lacra que no ha dejado de crecer en esta legislatura, a pesar de que Irene Montero ha contado con 100 millones de euros más que su predecesora para luchar contra la violencia de género.
La ministra ha presidido este encuentro, al que han asistido, además, numerosos representantes de las comunidades autónomas, del Ministerio de Justicia y de la Fiscalía. Sin embargo, a la hora de comparecer ante los medios, Montero ha evitado someterse a las preguntas de la prensa, pasándole así el testigo a su fiel escudera,´Ángela Rodríguez Pam y a la Delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell.
Esta última ha confirmado que los dos últimos asesinatos perpetrados el pasado fin de semana en Sevilla y en Villanueva del Arzobispo (Jaén) son considerados también "crímenes machistas", con lo que el número de mujeres asesinadas en lo que va de 2023 a manos de sus parejas o exparejas se eleva ya a 42, una cifra altísima, si tenemos en cuenta que el año pasado por estas fechas el número de víctimas mortales se situaba en 30. Además, la Delegación del Gobierno mantiene otros dos casos bajo investigación, de tal forma que el balance podría ser todavía peor.
Más dinero, más asesinatos
Según las estadísticas oficiales, 2022 se cerró con un total de 49 víctimas mortales, una más que el año anterior; y, a tenor de la tendencia, todo parece indicar que pronto se batirá este récord. Al ceder el testigo a sus subordinadas, Montero evita así dar la cara por el fracaso de sus políticas: después de casi cuatro años como ministra de Igualdad, no solo no ha conseguido reducir los asesinatos de mujeres, sino que éstos han aumentado, a pesar de contar con 100 millones de euros más que su predecesora para luchar contra la violencia de género.
Cuando Irene Montero recibió la cartera de manos de Carmen Calvo, los presupuestos del Ministerio contemplaban una partida para tal fin de 220 millones de euros. Aquel 2020, se registraron un total de 48 asesinatos. En 2021, Podemos consiguió que el Gobierno de coalición elevase la cifra hasta los 229 millones. Sin embargo, el número de víctimas fue exactamente el mismo.
Tras insistir en que el problema era la falta de presupuesto, en 2022, las cuentas del ministerio elevaron la partida destinada a la violencia de género hasta los 265 millones de euros. Récord absoluto. Desgraciadamente, y según reflejan las propias estadísticas de Igualdad, dicha cantidad no solo no consiguió reducir los asesinatos, sino que estos subieron a 49.
Con todo, la ineficacia del Ministerio de Igualdad ha sido duramente criticada no solo por los partidos de la oposición, sino también por las propias feministas, que ya hace tiempo denunciaron que Montero y su séquito estuvieran derrochando los fondos para luchar contra la violencia de género en "catas de chocolate y pintar bancos".
Balones fuera
Tras ser preguntada por las medidas que han implantado desde el primer comité de crisis -este es el quinto-, Rodríguez Pam se ha limitado a echar balones fuera: "Se han cambiado algunos protocolos, hemos cambiado también algunas actuaciones que tenemos en colaboración con otras administraciones, pero la mayoría de estas medidas son para complementar por parte de los gobiernos de las comunidades autónomas y por parte de otros poderes públicos; también, por supuesto, por parte de otros ministerios del propio Gobierno".
En este contexto, la secretaria de Estado de Igualdad ha aprovechado, no obstante, para poner en valor la "sensibilización" que promueven desde el Ministerio, volviendo a sacar a colación el tema de Jennifer Hermoso, y para denunciar la actitud de algunos políticos. "No hay nada más preocupante que el hecho de que pueda haber gobernantes que duden de la violencia machista", ha dicho Rodríguez Pam, que ha llamado una vez más a "sacar el negacionismo de las instituciones".
Las medidas planteadas por Igualdad
En cuanto a los últimos asesinatos, Igualdad ha confirmado que ninguna de las víctimas había interpuesto denuncia previa, por lo que el comité de crisis se ha centrado en tratar de buscar elementos en común que permitan detectar factores de riesgo. Entre ellos, se ha considerado el delicado momento que supone para muchas mujeres tener que regresar a la casa que compartían con su expareja tras la separación. Por eso, desde Igualdad han planteado la posibilidad de generalizar el acompañamiento de las mujeres por parte de la Policía cuando acuden al domicilio a recoger sus enseres, algo que hasta ahora solo se hace en casos de posible maltrato judicializados en los que medie una orden de alejamiento.
Además, también se ha considerado necesario revisar las licencias de armas, ya que algunos de los agresores han hecho uso de ellas para perpetrar los asesinatos. Aun así, la secretaria de Estado se ha limitado a decir que es algo que tendrán que hablar con el Ministerio del Interior y que, por tanto, no están en condiciones de aportar ningún dato más al respecto.