
Vox ha salido a criticar al PP por permitir en el Senado que PNV, Junts y Sumar formen grupo propio, con los diputados prestados por el PSOE para llegar al mínimo requerido por ley. Los de Abascal se preguntan "¿a qué están jugando?" en el partido de Feijóo, en un nuevo motivo de disputa entre ambos a tan sólo unos días de la investidura los próximo 26 y 27 de septiembre.
"No es coherente que el PP pida en el Congreso la disolución de los grupos de ERC y Junts y que en el Senado con su mayoría sí lo permita", denuncia Vox a través de un mensaje en redes sociales en el que también carga contra Esteban González Pons por "aceptar como interlocutor válido al partido de Puigdemont", después de que el vicesecretario del PP defendiera la Historia de Junts para anunciar contactos de cara a la investidura.
Los de Abascal anuncian, además, que "harán todo lo posible para impedir este fraude a los electores", por lo que es previsible que recurran a la vía judicial para denunciar la decisión de la Mesa del Senado, presidido por el popular Pedro Rollán, que se ampara en el informe de los letrados de la Cámara Alta que no consideran ilegal esta práctica.
Sin embargo, el PP ha criticado duramente que la Mesa del Congreso presidida por la socialista Francina Armengol haya permitido también formar grupo propio a ERC y Junts con diputados prestados del PSOE, dado que no cumplían los requisitos exigidos, de acuerdo con el resultado electoral del 23-J.
La formación de grupos conlleva una importante asignación económica, de ahí el empeño por los partidos en lograr llegar al mínimo requerido por ley. Cuando esto no sucede, en ocasiones otros grupos de mayor tamaño les prestan diputados y, una vez que se constituyen, regresan a sus filas.

