Liberado de cualquier tipo de atadura a los barones territoriales, Pedro Sánchez completará este fin de semana su nueva Ejecutiva durante el Comité Federal que se celebrará en La Coruña. Se trata de un nuevo órgano interno diseñado a su medida, obviando las cuotas territoriales y cualquier tipo de familia interna que no sea 100% sanchista.
De la Ejecutiva salen, por ejemplo, Andrea Fernández, responsable de Igualdad que será sustituida por la ministra Ana Redondo. La diputada leonesa era una de las últimas personas de confianza que le quedaban a la exvicesecretaria general, Adriana Lastra, dentro del corazón del partido. Fernández tampoco supo disimular sus simpatías por las que, otrora, fue la máxima responsable de Ferraz.
También abandona la Ejecutiva Mayte Pérez, portavoz del PSOE en las Cortes de Aragón y exconsejera de Presidencia y mano derecha del crítico Javier Lambán. Todo apunta a que Pérez podría la candidata del sector de Lambán en un próximo congreso de los socialistas aragoneses. Cuenta con el respaldo de los socialistas turolenses, de la que es secretaria general.
Frente a ella, se presentaría Pilar Alegría, ministra de Educación, y que tiene el apoyo del PSOE oscense. La ministra de Sánchez será desde el domingo la única aragonesa en la Ejecutiva socialista, aunque no tendrá un cargo específico sino que será vocal.
Valencia y Extremadura
También como vocal estará la ministra de Ciencia, Diana Morant. La valenciana es una de las mejores situadas para ser la próxima secretaria general del PSPV aunque en esta comunidad se está buscando una candidatura de unidad que integre al alcalde de Mislata, Carlos Fernández Bielsa, para evitar un Congreso conflictivo.
Una de las nuevas caras que entrarán en la Ejecutiva es la de la extremeña Marisol Mateos, secretaria de organización del PSOE en su comunidad, y mano derecha del expresidente autonómico Guillermo Fernández Vara, que continuará también en el órgano interno.
Desde que perdió la Junta, el extremeño está intentando pilotar la transición de su partido dejando un delfín que herede el partido. Todo apunta que será una mujer: Marisol Mateo o Lara Garlito, vicesecretaria general del PSOE en Extremadura.
Andalucía y las europeas
Más clara parece la intención de Sánchez de lanzar a su vicepresidenta primera y vicesecretaria general, María Jesús Montero, como candidata en Andalucía en 2027. La sevillana se habría opuesto en 2022, ya que el popular Juanma Moreno todavía no había sufrido desgaste, pero todo apunta a que en las próximas elecciones aceptará ser la cabeza de lista del PSOE para tratar de recuperar la Junta.
Tampoco parece que exista sorpresas en las elecciones europeas de este mes de junio. La intención de Sánchez de integrar como vocal en la Ejecutiva a la ministra de Transición Energética, Teresa Ribera, es la prueba más evidente de que quiere tenerla integrada en el órgano que estudiará los documentos y empezará a diseñar la campaña electoral.