Puigdemont contraprograma el pleno de investidura del socialista Salvador Illa. Ha citado a sus acólitos a las nueve de la mañana en el paseo Lluís Companys, a escasos metros del 'Parlament' donde una hora después está previsto que arranque la sesión de investidura. La intención del expresidente de la Generalidad es reventar el arranque de la legislatura catalana, aumentar la presión sobre ERC para que desista de votar a los socialistas y crear las condiciones para un nuevo choque con el Estado.

