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El Gobierno aprovecha el asesinato de Mocejón para colar su plan "contra los bulos y la desinformación"

El Ejecutivo rescata su plan "antibulos" y de "odio" en plena polémica por los mensajes en redes sociales y Telegram tras el asesinato del niño Mateo.

El Ejecutivo rescata su plan "antibulos" y de "odio" en plena polémica por los mensajes en redes sociales y Telegram tras el asesinato del niño Mateo.
Amigos del niño asesinado muestran una camiseta con su nombre, durante el minuto de silencio por el asesinato de un menor, en la puerta del Ayuntamiento de Mocejón, a 18 de agosto de 2024, en Mocejón, Toledo. | Europa Press

De la cautela tras el asesinato a la hiperactividad de tuits y reacciones. Pedro Sánchez espero más de 24 horas para emitir un primer mensaje de condena y solidaridad con el crimen del joven Mateo. No lo hizo hasta la noche del lunes, una vez que la Guardia Civil había detenido al asesino del niño.

A las 72 horas del crimen, todo son mensajes del Gobierno para condenar "los bulos y el acoso en redes". En el Ejecutivo ponen el foco en la cantidad de mensajes en la red social X que, a las pocas del asesinato y sin pruebas, vinculaban el asesinato con unos menores inmigrantes que estaban acogidos en un hotel de Mocejón. En cuentas de simpatizantes de Alvise Pérez incluso se llegó a asegurar que la Guardia Civil estaba buscando a un magrebí. No fue así. Se trataba de un joven español de 20 años y vecino de la localidad que padece problemas psiquiátricos.

En la familia del joven Mateo, en especial el primo que ejercía de portavoz, denunciaron en público los mensajes de odio que estaban recibiendo por haber pedido que no se relacionase el crimen con ninguna raza. Numerosos usuarios de X le reprocharon su pasado de misionero y su colaboración con jóvenes africanos, llegando a afirmar que sus manos "estaban manchadas de sangre".

El Gobierno aprovecha la polémica

Ahora, el Gobierno coge todos estos elementos y los usa para avanzar en sus camino contra "los bulos y desinformación" aprovechando el debate abierto en la sociedad y las declaraciones del fiscal de Sala de la Unidad de delitos de odio, Miguel Ángel Aguilar, en la SER en la que pedía acabar con el anonimato en las redes.

El ministro de Justicia, Félix Bolaños, en la red social X, pedía "combatir los bulos y el acoso en redes" mientras señalaba que "nos jugamos mucho como sociedad y como democracia". Unas palabras que luego amplificaban otros miembros del gabinete de Sánchez. Isabel Rodríguez, ministra de Vivienda, pedía "perseguir" unas acciones que "solo generan odio" y con el objetivo claro de preservar unos pilares fundamentales como la "verdad y el derecho a la información veraz".

"Hay quienes han utilizado estas desgracias de manera torticera para crear odio, para generar xenofobia y racismo", criticaba la ministra. "Los delitos se deben de perseguir independientemente del lugar en el que se hayan cometido y el formato", apuntaba en un acto en Castilla la Mancha.

Desde el socio minoritario, Sumar, la ministra de Sanidad, Mónica García, respaldaba esta estrategia e iba más allá al reprochar "a la derecha" que "aproveche cualquier tragedia para lanzar bulos racistas". Incluso culpaba al PP de estos mensajes y los relacionaba con el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol. "Esa xenofobia la hemos visto en el caso de Toledo, esos mensajes calan", señalaba

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