La última sesión de control del año al Gobierno de Pedro Sánchez coincide con la tercera declaración judicial de Begoña Gómez, imputada por cuatro delitos, en los Juzgados de Plaza Castilla. El Pleno en el Congreso se celebra, por tanto, en un ambiente de tensión tras las declaraciones y acusaciones vertidas por el comisionista Víctor de Aldama contra varios miembros del Gobierno.
El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, enumerando los principales implicados en el caso Koldo, como el exministro de Transportes, José Luis Ábalos, su exasesor, Koldo García, el Secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, entre otros, ha reprochado el año cargado de corrupción que ha protagonizado el Ejecutivo. "12 meses, 12 causas", ha sintetizado Feijóo, al tiempo que ha ironizado con la comparecencia de su mujer, preguntándose si el desayuno que han compartido esta mañana aparecerá en su próximo documental: "Tampoco contestará a nada", ha vaticinado.
El narco y los "bulos"
Como sucede habitualmente en el control al Gobierno, Sánchez ha optado por no responder y atacar a Feijóo, recordándole, de nuevo, su foto con Marcial Dorado. "Con las imágenes que tiene usted, con las amistades que ha tenido, señor Feijóo, tápese un poco", decía, tirando del clásico argumentario del PSOE cuando se ve acorralado por la corrupción que ha completado sentenciando: "Ustedes al bulo, nosotros al BOE".
El líder popular ha criticado su "victimización" con el poder judicial, reprochándole sus permanentes ataques. "Preferiría un señor Bolaños en cada tribunal y que la presidenta del Supremo fuera la señora Montero", le ha dicho, a lo que el Jefe del Ejecutivo ha asegurado que "estoy convencido de que una amplísima mayoría de jueces y juezas cumple con su labor con absoluto rigor", llegando a presumir de que su Gobierno "ha contribuido al fortalecimiento de la Justicia en España", presumiendo también de "hechos" y no de "bulos".