Este jueves, la actriz Elisa Mouliáa y su abogado, Alfredo Arrién, se presentaron ante el juzgado encargado del 'caso Errejón', con el objetivo de volcar el teléfono de la actriz para que se pudieran analizar las conversaciones mantenidas con el exdiputado de Podemos, Íñigo Errejón. Sin embargo, el juez no pudo acceder a los datos debido a la falta de "medios técnicos".
Durante su comparecencia, Mouliáa dejó claro que, tras la presunta agresión de la que fue víctima, no mantuvo "ninguna amistad" con Errejón. La actriz enfatizó que no existe ninguna evidencia de un vínculo cercano entre ambos, asegurando que las interacciones entre ellos se redujeron a "ocho contestaciones esporádicas de Instagram, de stories, de él hacia mí y de yo hacia él", todo ello en un periodo de dos años. Además, subrayó que ninguno de los mensajes hace alusión a un posible reencuentro.
Esta declaración contradice las versiones previas sobre la relación entre ambos, y pone de manifiesto que, según la actriz, los mensajes intercambiados fueron mínimos y carecieron de una continuidad que sugiriera una relación de amistad o proximidad.