
Alberto Núñez Feijóo ha reunido a su Comité Ejecutivo Nacional en los días previos a la Interparlamentaria que celebrará en Sevilla, coincidiendo con el tercer aniversario de su nombramiento como presidente del PP. Frente a la plana mayor del partido, ha presumido de "estar más unidos que nunca" frente a un presidente "zombi" que no es capaz de poner de acuerdo a su Gobierno sobre el gasto en defensa o el SMI.
El presidente del Partido Popular ha exigido a Pedro Sánchez que convoque un debate sobre el estado de la nación, después de que el Ejecutivo se rompiera, una vez más, por el gasto en defensa y la permanencia en la OTAN, con Sumar votando a favor de salir de abandonar la Alianza Atlántica el mismo día que el presidente tenía que defender en Europa la posición de España sobre el rearme del continente.
Dado que el Ejecutivo tiene intenciones de no pasar por el Congreso para aprobar un incremento del gasto en defensa hasta llegar, al menos, al 2% del PIB, Feijóo le ha reclamado que, como mínimo, convoque a las Cortes para debatir sobre la situación del país, después de criticar que Sánchez no haya sido capaz siquiera de sacar adelante ni siquiera los primeros presupuestos de la legislatura, con unas cuentas públicas que van a ser prorrogadas por tercera vez.
Las tres exigencias a Sánchez
"Pido al Gobierno tres cosas, en nombre de la democracia: que lleve al Congreso su plan de Defensa, si lo tiene, que presente los PGE en la Cámara, como es su deber constitucional, y que convoque el debate del Estado de la Nación para que retrate la soledad de un Gobierno, que ya no es tal, y la soledad de un presidente zombi", ha dicho ante los suyos, en uno de los momentos más aplaudidos de su discurso.
Feijóo ha presumido de proyecciones electorales, el día que las encuestas le dan buenos resultados a nivel nacional y también en Valencia y ha lamentado ser el partido objetivo de las críticas tanto de PSOE como de Vox. A este último le ha dirigido también un mensaje: "Incluso Vox nos ataca, muchas veces, más que el propio Gobierno", se ha quejado, en referencia a "la pinza" que ambos partidos ejercerían contra el PP, y que achaca a su liderazgo en votos y en sondeos.
Después de insistir en su crítica a la persecución de medios por parte del Ejecutivo, recordando el capítulo de Prisa y Telefónica, y de reprocharle su control institucional, Feijóo ha lamentado la aspiración del presidente de sólo gobernar con el ejecutivo, que "está a su servicios", después de "señalar al judicial" y "secuestrar el legislativo". En contraposición a todo esto, el presidente del PP ha presumido de que su partido es "la alternativa" y "de estar más unidos que nunca".

