
El socio minoritario del Gobierno tiene el anhelo de rebajar la edad legal para ejercer el derecho al voto a los 16 años. Esta propuesta vendría acompañada de la introducción de contenidos educativos específicos orientados a familiarizar a los jóvenes con el funcionamiento del Estado y las instituciones democráticas. No obstante, esta iniciativa ha reavivado las tensiones dentro del Ejecutivo de coalición, ya que los socialistas se han mostrado tradicionalmente reticentes ante esta posibilidad.
Según diversos sondeos, la medida podría favorecer especialmente a las formaciones situadas en los extremos del espectro político, lo que incrementa la cautela del sector más moderado del Gobierno.
Se trata de una reivindicación histórica de Izquierda Unida. Sin embargo, en el actual contexto de fragmentación dentro del bloque progresista, con la pugna entre Podemos y Sumar, los principales beneficiarios de esta medida, según reflejan las encuestas, no serían precisamente las fuerzas de izquierda. Los datos apuntan a que la formación liderada por Santiago Abascal concentraría en torno al 25 % del apoyo entre los votantes más jóvenes, es decir, uno de cada cuatro. Aunque el grupo más numeroso lo conforman aquellos que optarían por la abstención, el voto en blanco o el nulo, alcanzando casi el 32 % del total.
La iniciativa legislativa está siendo elaborada por el Ministerio de Juventud e Infancia, bajo la dirección de la dirigente de Izquierda Unida, Sira Rego. El propósito del departamento es impulsar su tramitación antes del verano. La propuesta contempla una reforma de calado que podría tener un impacto sustancial en la configuración del voto, al incorporar cerca de un millón de nuevos votantes, jóvenes de entre 16 y 17 años, en futuras citas electorales.
Para el socio minoritario del Gobierno, la propuesta representa un paso decidido hacia el ensanchamiento democrático en España. No obstante, y a pesar de que el PSOE asumió en su 41º Congreso Federal, celebrado en Sevilla a finales de 2024, el compromiso de impulsar la rebaja de la edad de voto, a instancias de las Juventudes Socialistas, la cúpula del partido no parece especialmente dispuesta a avanzar en esa dirección. "No se ha abordado esa cuestión en ninguno de los órganos colegiados del Consejo de Ministros", afirmaba este martes la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, desde La Moncloa, evitando pronunciarse de forma clara sobre una iniciativa que, según el Ministerio dirigido por Sira Rego, ya se encuentra en un estado avanzado.
Izquierda Unida ha tratado de impulsar este debate en diversas ocasiones. La propuesta de rebajar la edad legal para votar ya figuraba en su programa electoral de 2011. Desde entonces, la cuestión ha regresado de forma periódica al ámbito gubernamental, primero con Unidas Podemos en 2019 y, más recientemente, como parte del programa de Sumar en las elecciones generales de 2023. No obstante, la iniciativa ha tropezado reiteradamente con las reservas del Partido Socialista.
Por el momento, Austria es el único país de la Unión Europea que permite votar en elecciones nacionales a partir de los 16 años. Sin embargo, otros Estados miembros, como Alemania, Bélgica, Grecia o Malta, ya han rebajado la edad mínima para participar en los comicios europeos.

