
La Conferencia de Presidentes no parecía tener asegurada su celebración el próximo viernes 6 de junio, apenas 48 horas antes de que el Partido Popular se manifieste en la Plaza de España de Madrid, a las 11.00, bajo el lema "Mafia o democracia". Génova abría todas las posibilidades si el Gobierno no aceptaba ampliar el orden del día para hablar de inmigración, financiación autonómica o energía porque Pedro Sánchez se estaría saltando los estatutos de este organismo.
La portavoz, Pilar Alegría, ha dicho este martes tras el Consejo de Ministros que acatan la petición, aunque los tiempos seguirán siendo los mismos, apenas 10 minutos por tema, lo que convertirá la reunión, de nuevo, en apenas una foto institucional sin contenido de la que es difícil que pueda salir ningún acuerdo. El Gobierno presume de haber dejado sin excusas al PP y alardea, incluso, de respeto por las instituciones.
Y es que el reglamento de la Conferencia de Presidentes recoge que si hay diez comunidades que solicitan debatir sobre un determinado asunto, debe incluirse en la agenda del día. Moncloa sólo quería hablar de vivienda y educación, para dejar fuera la financiación autonómica. Después del apagón o el caos ferroviario, los de Feijóo también quieren tratar estos temas en la reunión prevista en Barcelona.
Todas las reuniones preparatorias entre el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, y los consejeros de Presidencia autonómicos han concluido sin acuerdo sobre la agenda. Este lunes, las regiones del PP enviaron por escrito su petición al Gobierno para oficializarlo, pero aún no han obtenido respuesta oficial, según ha podido saber Libertad Digital.
La presencia del Rey en la reunión frenaba en parte las opciones de promover un boicot, como ya hicieran en el CPFF con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, o cuando Ayuso dio plantó a Sánchez en la ronda de contactos que llevó a cabo con las CCAA en Moncloa. Esto, unido a la defensa de Feijóo del respeto institucional, podrían motivar un recurso ante la justicia en lugar de escenificar un plantón.
Génova respalda a sus CCAA
El portavoz del PP, Borja Sémper, aseguró ayer que "apoyarían" cualquier decisión que adopten sus presidentes autonómicos y aseguró que "no se puede descartar ninguna opción", al ser preguntado por un posible plantón, aunque señaló que la responsabilidad sobre lo que pueda ocurrir es del Ejecutivo de Sánchez, dada su negativa a cambiar el orden del día.
Este es también otro de los motivos por los que algunos en el PP sopesaban no acudir, dada la experiencia de la primera reunión celebrada en Santander hace seis meses. Apenas sirvió para que el presidente pudiera vestirse el traje institucional y se tomara la foto con los presidentes autonómicos en pleno cerco por el caso Begoña.
Ahora, con su hermano imputado y el escándalo de Leire Díez, el objetivo vuelve a ser desviar el foco de la actualidad y simular normalidad institucional en un momento crítico para el país en el que el Gobierno ha colonizado las instituciones y las cloacas del PSOE buscan desprestigiar a la UCO, a los jueces, los medios de comunicación y la oposición, inventándose de por medio bulos que achacan a sus adversarios.

