L. D. / EFE.-
Vestida con unas botas de goma y con ropa deportiva, Ángela, que se encuentra en buen estado de salud, no pudo reprimir las lágrimas al verse libre. Las primeras palabras de Ángela María después de ser liberada por sus captores fueron: “me encuentro muy bien, perfecta. Estoy muy agradecida a todos y siento una gran emoción”.
Agregó que para llegar hasta el sitio donde ha sido puesta en libertad, viajó a caballo durante una hora y media, siempre acompañada de los guerrilleros, y luego estuvo otras cuatro horas y media andando. Del Castillo fue secuestrada en el municipio de Florida, en el departamento del Valle del Cauca, unos 30 kilómetros al sureste de Cali, la capital de esa provincia.
El secuestro se produjo cuando la joven, recién graduada como psicóloga, salía del hospital de esa localidad, en donde trabajaba como coordinadora de los grupos municipales de Bienestar Familiar que funcionan en Florida. El grupo rebelde Jaime Bateman Cayón tiene apenas relevancia en Colombia y está compuesto por un reducido número de antiguos guerrilleros del Movimiento 19 de Abril (M-19) que no aceptaron su disolución y su paso a la política en 1990.
Cuando se le pregunto cómo había estado, Ángela María contestó: “sola, esa es la palabra” y dijo que todo el tiempo fue custodiada por dos hombres y una mujer del grupo Jaime Bateman Cayón, que estuvo en tres sitios diferentes y la noticia de su liberación se la dieron el viernes en horas de la noche. Del Castillo señaló que ahora se encuentra con más fuerza para seguir en su labor, pero que hubo momentos en los cuales estuvo “muy angustiada”.
Ángela María es hija de un emigrante español, José del Castillo, que llegó a Colombia en 1957 y, después de trabajar como peón y agricultor, dispone ahora de unas tierras de cultivo de caña de azúcar. Con algunos momentos de sonrisas y otros de llanto, Ángela María advirtió que a pesar del secuestro “no lograron derrumbarme y todos los instantes los he soportado cada vez mejor”.
Entre tanto, el comandante “Tomás”, del grupo guerrillero Jaime Bateman Cayón, aseguró que se ha comprometido con la Embajada de España y los demás organismos presentes en la liberación de Ángela María, a “no tocar a la familia Del Castillo, que siempre se ha mostrado decidida a vivir en el mismo pueblo”. El jefe rebelde leyó un comunicado en el que criticó al Gobierno del presidente Andrés Pastrana, denuncio “corrupción” y sostuvo que existe una “connivencia entre militares y paramilitares”.
También calificó el Plan Colombia como contrario a la política de paz “ya que es militarista” y señaló que la liberación de Ángela María es un “gesto humanitario, pero de carácter político”.
Agregó que para llegar hasta el sitio donde ha sido puesta en libertad, viajó a caballo durante una hora y media, siempre acompañada de los guerrilleros, y luego estuvo otras cuatro horas y media andando. Del Castillo fue secuestrada en el municipio de Florida, en el departamento del Valle del Cauca, unos 30 kilómetros al sureste de Cali, la capital de esa provincia.
El secuestro se produjo cuando la joven, recién graduada como psicóloga, salía del hospital de esa localidad, en donde trabajaba como coordinadora de los grupos municipales de Bienestar Familiar que funcionan en Florida. El grupo rebelde Jaime Bateman Cayón tiene apenas relevancia en Colombia y está compuesto por un reducido número de antiguos guerrilleros del Movimiento 19 de Abril (M-19) que no aceptaron su disolución y su paso a la política en 1990.
Cuando se le pregunto cómo había estado, Ángela María contestó: “sola, esa es la palabra” y dijo que todo el tiempo fue custodiada por dos hombres y una mujer del grupo Jaime Bateman Cayón, que estuvo en tres sitios diferentes y la noticia de su liberación se la dieron el viernes en horas de la noche. Del Castillo señaló que ahora se encuentra con más fuerza para seguir en su labor, pero que hubo momentos en los cuales estuvo “muy angustiada”.
Ángela María es hija de un emigrante español, José del Castillo, que llegó a Colombia en 1957 y, después de trabajar como peón y agricultor, dispone ahora de unas tierras de cultivo de caña de azúcar. Con algunos momentos de sonrisas y otros de llanto, Ángela María advirtió que a pesar del secuestro “no lograron derrumbarme y todos los instantes los he soportado cada vez mejor”.
Entre tanto, el comandante “Tomás”, del grupo guerrillero Jaime Bateman Cayón, aseguró que se ha comprometido con la Embajada de España y los demás organismos presentes en la liberación de Ángela María, a “no tocar a la familia Del Castillo, que siempre se ha mostrado decidida a vivir en el mismo pueblo”. El jefe rebelde leyó un comunicado en el que criticó al Gobierno del presidente Andrés Pastrana, denuncio “corrupción” y sostuvo que existe una “connivencia entre militares y paramilitares”.
También calificó el Plan Colombia como contrario a la política de paz “ya que es militarista” y señaló que la liberación de Ángela María es un “gesto humanitario, pero de carácter político”.