Después de que un globo espía chino sobrevolara durante varios días EEUU y fuera finalmente derribado en el Atlántico, el Gobierno estadounidense ha anunciado el derribo de otros tres objetos "volantes no identificados" en apenas 72 horas de los que apenas han trascendido datos.
El primero fue derribado el viernes sobre el espacio aéreo de Alaska. El sábado, otro objeto fue abatido por un caza F-22 estadounidense en el Yukón, al oeste de Canadá. El domingo, mientras, un F-16 disparó un misil AIM9x para derribar un objeto en la zona de los Grandes Lagos, en Michigan, a unos 6.000 metros de altura.
El objeto detectado en Michigan tenía forma octogonal con varias cuerdas sueltas, según fuentes gubernamentales citadas por CNN. El derribado el viernes era plateado y tenía el tamaño de un coche pequeño. El abatido el sábado era cilíndrico y "similar" al globo derribado en el Atlántico, aunque de menor tamaño, según indicó la ministra de Defensa canadiense, Anita Annad. Todos ellos volaban a menor altura que el globo espía, que según la versión china era un dispositivo "meteorológico" que acabó por error en EEUU.
Mientras la oposición estadounidense reclama más datos sobre los objetos interceptados, en los medios locales se multiplican las teorías sobre los dispositivos derribados, hasta el punto de que un alto mando del Pentágono, el general Glen D. Van Herck, dejó la puerta abierta con sus declaraciones a su procedencia alienígena. Cuando una periodista le preguntó si estaba descartado que fueran de origen extraterreste, el general se limitó a decir que la amenaza se estaba evaluando y que "nada estaba descartado".
Entre las dudas está por qué se están detectando ahora tantos objetos espía: desde el gobierno estadounidense se achaca "en parte" este hecho a que tras la localización del globo chino se está rastreando "con más atención" la presencia de elementos similares.
Sin embargo, tampoco se descarta que China o alguna otra potencia extranjera esté detrás del envío ahora de estos dispositivos con el fin de poner a prueba la capacidad estadounidense de detectar presencias extrañas en su espacio aéreo. El secretario general de la OTAN, por su parte, ha destacado en medio de estas informaciones cómo China y Rusia "están incrementando las actividades de vigilancia e inteligencia" contra países de la Alianza. "Lo vemos en el ciberespacio, lo vemos con satélites, más y más satélites, y lo vemos con globos", ha afirmado.
Por el momento, desde el Gobierno no hay respuesta oficial acerca de quién está detrás de estos objetos, de los que apenas se sabe que eran más pequeños que el globo chino y carecían de un mecanismo para propulsarse. Tampoco sobre sus objetivos, aunque en el caso de Alaska algunos medios están recordando la presencia de objetivos estratégicos en la zona, desde bases militares a oleoductos.