Donald Trump, herido leve tras un intento de magnicidio durante un mitin en Pensilvania

El expresidente Donald Trump ha llegado esta medianoche a Newark (Nueva Jersey) en aparente buen estado, tras el intento de asesinato sufrido este sábado en Pensilvania. Según las imágenes de Fox News, Trump bajó de su avión privado por su propio pie e incluso saludó a alguna persona que se encontraba en la pista levantando la mano.

Los hechos ocurrieron en la tarde de este sábado, cuando el expresidente de EEUU participaba en un mitin. Tras escucharse al menos tres detonaciones, Donald Trump, candidato republicano a las elecciones del próximo noviembre, se ha llevado la mano a la cabeza, concretamente a la oreja derecha, y se ha refugiado detrás del atril desde el que estaba pronunciando su discurso, mientras se oían los gritos del público asistente.

Mientras era evacuado a pie del recinto por el Servicio Secreto, con la cara ensangrentada, Donald Trump levantaba el puño para hacer ver a sus seguidores que se encontraba bien tras sufrir lo que el FBI ya ha calificado como "intento de magnicidio". Posteriormente, y ya fuera del recinto, volvía a levantar el puño antes de ser introducido en un coche oficial.

Poco después, su equipo de campaña informaba de que se encontraba bien. "El expresidente Trump agradece a los servicios de seguridad y de primeros auxilios la rapidez de acción durante este acto despreciable. Él está bien y está siendo atendido en una instalación médica local", informó el portavoz Steve Cheung en un comunicado.

El atacante, que ha sido abatido por las fuerzas de seguridad, ha sido identificado por el FBI como un hombre blanco de 20 años originario de Pensilvania –el mismo estado donde se celebraba el mitin– que responde al nombre de Thomas Mathiew Crooks. Sin embargo, se desconocen hasta el momento cuáles pueden ser sus motivaciones y si era lo que se conoce como un 'lobo solitario' o contó con algún cómplice.

El propio Trump ha publicado un mensaje a través de la Truth Social, donde ha confirmado que una bala le alcanzó la oreja. "Me dispararon con una bala que atravesó la parte superior de mi oreja derecha. Supe inmediatamente que algo andaba mal porque escuché un zumbido, disparos e inmediatamente sentí la bala atravesando la piel. Hubo mucho sangrado, entonces me di cuenta de lo que estaba pasando. ¡DIOS BENDIGA AMERICA!".

Trump también ha querido mostrar sus condolencias a las familias de las otras víctimas: "Lo más importante es que quiero expresar mi más sentido pésame a la familia de la persona que murió en el mitin, y también a la familia de otra persona que resultó gravemente herida".

Primeras reacciones

A través de un comunicado difundido por la Casa Blanca, el presidente Joe Biden -que también ha telefoneado a Donald Trump- ha condenado lo sucedido y se ha alegrado de que, finalmente, Trump tan solo haya resultado herido leve: "Jill y yo agradecemos al Servicio Secreto que lo pusiera a salvo. No hay lugar para este tipo de violencia en Estados Unidos. Debemos unirnos como nación para condenarla".

Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, dijo rezar junto a su mujer por Trump y el resto de asistentes en ese encuentro en Butler y subrayó en X que "ese horrendo acto de violencia en un mitin pacífico de campaña no tiene lugar en ese país y debería ser condenado de forma unánime". "Alguien acaba de intentar ASESINAR al presidente Trump", añadió en X la legisladora Marjorie Taylor Greene, uno de sus apoyos más firmes en el Congreso. "Rezo por el presidente Trump y por todos los del mitin en Pensilvania. Que Dios esté con todos ellos", dijo en esa misma red social el senador afroamericano Tim Scott, que suena como posible vicepresidente de Trump en caso de regresar a la Casa Blanca.

El exmandatario demócrata Barack Obama (2009-2017) también ha hecho público un comunicado en el que asegura que, aunque no se sepa exactamente qué ha pasado, todo el mundo "debería estar aliviado" de que Trump no resultara herido de gravedad, e insiste en la necesidad de "aprovechar el momento para renovar el compromiso con el civismo y el respeto en la política".

El líder de los demócratas en la Cámara Baja, Hakeem Jeffries, ha agradecido en X a los agentes de seguridad su "decisiva respuesta": "Estados Unidos es una democracia. La violencia política de cualquier tipo nunca es aceptable". El líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, dijo por su parte estar "horrorizado" por lo sucedido y aliviado de que Trump esté a salvo.

Sánchez, el último en condenar el atentado

En el ámbito internacional, el presidente Pedro Sánchez ha sido de los últimos mandatarios en condenar el intento de magnicidio. "Quiero trasladar mi más rotunda condena al ataque sufrido por Donald Trump durante un mitin en Pensilvania. La violencia y el odio no tienen cabida en una democracia", ha escrito en un mensaje difundido ya esta mañana -más de ocho horas después- en su cuenta de X. "Mis mejores deseos para una pronta recuperación al expresidente Trump y al resto de heridos y mi más sincero pésame a los familiares de la persona fallecida", ha añadido.

"Alimentar el odio hacia quien piensa diferente desemboca en situaciones como la vivida hace unas horas en EEUU –ha escrito poco después el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo–. Reivindico la moderación, lamento que haya quien prefiera disparar a votar para defender su ideología, y por supuesto deseo una pronta recuperación a Donald Trump".