Los dos líderes realizaron breves declaraciones a la prensa en el Despacho Oval antes de iniciar la reunión, que se produjo solo unas horas después de que la Casa Blanca anunciara un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania valorado en 8.000 millones de dólares, que incluye bombas capaces de alcanzar blancos rusos a 130 kilómetros de distancia.

