El ex primer ministro de Italia Silvio Berlusconi ha fallecido este lunes a los 86 años en el hospital San Rafael, de Milán, donde permanecía ingresado aquejado de una leucemia.
La salud de Berlusconi había empeorado en los últimos meses. En abril, trascendió que sufría leucemia mieloide cuando el político tuvo que permanecer ingresado en la UCI durante 45 días. Hace unos días regresó al hospital. La preocupación por su estado de salud aumentó en las últimas horas, cuando se desplazaron al centro sus cinco hijos y su hermano Paolo. Allí se reunieron con su actual compañera, la diputada Marta Fascina, 53 años más joven que él.
Berlusconi, fundador de Forza Italia, ocupó en tres ocasiones la jefatura de Gobierno: entre mayo de 1995 y enero de 1995, entre junio de 2001 y mayo de 2006 y entre mayo de 2008 y noviembre de 2011. Su partido es ahora socio de la actual coalición de Gobierno, junto a la Liga de Matteo Salvini y los Hermanos de Italia de Giorgia Meloni.
El también fundador de Mediaset volvió a ocupar en las últimas elecciones un cargo político como senador, lejos de la primera línea política de la que fue protagonista en las últimas décadas, en las que también se vio envuelto en numerosas polémicas judiciales, empresariales y personales.
Berlusconi, nacido en Milán en 1936, fundó su primera constructora, Cantieri Riunti Milanese, con 25 años. Fue el inicio de una meteórica carrera empresarial que lo convirtió en uno de los hombres más ricos de Italia y que se convirtió en un trampolín para su carrera política.
En los años 70 puso en marcha una televisión por cable que emitía en uno de los barrios milaneses que él mismo había construido, se hizo con parte del capital del diario Il Giornale y creó la televisión Canale 5. En 1978 fundó Fininvest, la sociedad que hoy controla un imperio formado entre otros por la casa editorial Mondadori, la productora de cine Medusa y el grupo audiovisual Mediaset. También fue dueño del AC Milan desde los años 70 hasta 2017.
Su carrera política arrancó en 1994 con la fundación de Forza Italia: ese mismo año ganó las elecciones y se convirtió en jefe de un Gobierno en coalición con la Liga Norte, entonces encabezada por su fundador Umberto Bossi. Tuvo que dejar el cargo en diciembre de ese mismo año, acosado por la oposición y acechado por la justicia.
Volvió al poder en 2001 con la coalición conservadora Casa de las Libertades, con la que gobernó durante cinco años. Su Gobierno fue uno de los más longevos en el agitado panorama político italiano.
En 2006, intentó revalidar su mandato, pero perdió contra Romano Prodi, aunque solo dos años después, con 71, aprovechó la caída del Gobierno para volver ser primer ministro, esta vez con el Pueblo de la Libertad (con Forza Italia y la derechista Alianza Nacional). Dirigió de nuevo el país en coalición con la Liga Norte hasta que en 2011 la crisis económica y otra vez los escándalos judiciales hundieron su Gobierno y Mario Monti asumió la dirección de un Ejecutivo técnico.
En paralelo, Berlusconi fue protagonista de numerosas polémicas y juicios relacionados con la corrupción y el abuso de poder, entre ellas el caso Ruby, apodo de la joven marroquí con la que Berlusconi supuestamente mantuvo relaciones sexuales cuando ella era menor. Todos acabaron en absolución o en la prescripción del delito.

