Los gobiernos europeos han vuelto a bloquear este viernes la petición de España para que el catalán, el euskera y el gallego sean reconocidos como lenguas oficiales de la Unión Europea.
Pese al impulso del Gobierno español, varios Estados miembros siguen mostrando reservas ante los costes y las implicaciones jurídicas de ampliar el número de lenguas oficiales en las instituciones europeas, lo que ha impedido avanzar en la aprobación de la medida.

