
La propia organización terrorista y el régimen de los ayatolas iraní han confirmado que Ismael Haniya, principal líder de Hamás fuera de Gaza y que fuera primer ministro de la dictadura implantada en la Franja en 2006, ha sido eliminado en un ataque en Teherán.
Haniya vivía en Qatar huyendo de la justicia israelí y protegido por el régimen dictatorial del emirato, de mayoría chií y aliado de Irán, pero se encontraba en Teherán para asistir a la investidura del Masud Pezeshkian como presidente.
Tanto el régimen iraní como la propia organización terrorista Hamás han lamentado la muerte de Haniya, al que han calificado de "mártir", han culpado a Israel de lo ocurrido y han prometido que "no quedará sin castigo".
Dos blancos en 24 horas
Es el segundo golpe contra las organizaciones terroristas financiadas por Irán en las fronteras de Israel, ya que este martes el ejército israelí anunció haber acabado con Fuad Shukr, considerado "el jefe militar de mayor rango" de Hezbolá y muy cercano al líder de la organización terrorista, Hasán Nasrallah.
Israel considera a Shukr "responsable del asesinato de los niños de Majdal Shams y de numerosos civiles israelíes" en los últimos años. Su muerte podría añadir algo más de tensión a la situación ya especialmente compleja en la frontera ente el Líbano y el Estado hebreo, que corre un riesgo cierto de escalar a un guerra total en cualquier momento.
Qatar, China e Irán lamentan la muerte de Haniya
Tres de los países con regímenes más inmorales y repugnantes del mundo, Qatar, China y Irán, se han apresurado a condenar la eliminación del criminal Haniya, amenazando además a Israel con las consecuencias que tendrá la muerte del terrorista.
El Ministerio de Exteriores de Qatar ha asegurado que "este asesinato y la imprudente conducta israelí, que tiene como objetivo a los civiles en Gaza, llevará a la región al caos y socavará las oportunidades para alcanzar la paz", dijo en un comunicado, en el que condenó "categóricamente" la muerte de Haniya.
Del mismo modo, China mostró este miércoles su "oposición y condena" y advirtió de la posibilidad de que esto se traduzca en un recrudecimiento del conflicto en la región: "Prestamos gran atención a esta cuestión y nos sentimos preocupados por el hecho de que esto cause una escalada en la región", indicó Lin Jian, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, en una rueda de prensa.
Por su parte, Masud Pezeshkian advirtió a Israel de que se arrepentirá de la eliminación Haniya: "La República Islámica de Irán defenderá su integridad territorial, su dignidad, su honra y honor, y hará que los terroristas invasores se arrepientan de su cobarde acción", afirmó el nuevo presidente de Irán, para cuya investidura había viajado el de Hamás hasta Teherán.
