
En una operación conjunta, el ejército israelí, bajo la dirección de COGAT (Coordinación de Actividades Gubernamentales en los Territorios), y la Embajada de Estados Unidos en Israel, lograron rescatar a Fawzia Amin Sido, una joven de origen yazidí de 21 años, quien estuvo más de una década en cautiverio en la Franja de Gaza.
Fawzia fue secuestrada cuando tenía sólo 11 años por terroristas del grupo yihadista Estado Islámico. Posteriormente, fue trasladada a Gaza, donde permaneció bajo el control de un miembro de Hamas afiliado a ISIS. Durante la operación "Espadas de Hierro", el terrorista que la mantenía cautiva fue abatido durante los ataques de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en la Franja. Fawzia aprovechó este momento para escapar y ocultarse.
En una operación compleja y secreta, que involucró a Israel, Estados Unidos y otros actores internacionales, Fawzia fue rescatada. Cruzó hacia Israel a través del cruce de Kerem Shalom, luego fue trasladada a Jordania por el Puente Allenby y finalmente regresó a su hogar en Irak, donde se reunió con su familia.
Este rescate ha vuelto a poner en evidencia la conexión entre Hamás y Estado Islámico, así como los crímenes contra la humanidad cometidos por estas organizaciones en la Franja de Gaza. Las Fuerzas de Defensa de Israel han reafirmado su compromiso de desmantelar la infraestructura terrorista y continuar liberando a rehenes bajo el control de Hamás.
El gobierno israelí reiteró su compromiso a seguir promoviendo esfuerzos humanitarios, en coordinación con la comunidad internacional y en pleno cumplimiento del derecho internacional y los valores del Estado de Israel.

