
Desde hace unos años hasta ahora hemos podido ver en distintas partes de España como se ha creado una especie de "ola antiturismo" en grandes ciudades como Barcelona o las Islas Canarias, siendo este último lugar el escenario de una de las escenas más lamentables del curso pasado, donde un grupo de manifestantes increparon y acosaron a los turistas bajo el lema "Canarias tiene un límite". De esta forma, algunas regiones ya han empezado a buscar la forma de limitar la llegada de turistas durante el verano, como es el caso de Formentera y de Ibiza.
En el caso de la isla de Formentera ya desde hace varios años se viene cobrando a los turistas una tasa por cada coche o moto con el que quieran acceder a la isla, cobrándoles desde 2024 un total de 9 euros por día en el caso de los coches y 4,5 euros en el caso de las motos.
Esta medida sólo es aplicable a los turistas, estando exentos los residentes de las islas y también las empresas de alquiler de coches, aunque existe una cuota de 2.268 turismos y 5.880 motos que pueden poner en alquiler todas estas empresas en conjunto, y cuyas plazas se adjudican por orden de alta en el DRIAT y en relación con la actividad de alquiler de vehículos sin conductor en la isla de Formentera. Esta es una diferencia importante con lo aplicado en Ibiza, cuyas empresas de alquiler de coches sí pagan una tasa en función de su flota de vehículos.
Si además quieren pasar sus vacaciones durante los meses de julio o agosto, el desembolso mínimo que deberán hacer es de 45 euros en el caso de los coches y de 22,5 euros en el caso de las motos, que en ambos casos corresponde a una estancia de cinco días. Sin embargo, si veranean durante los meses de junio o septiembre la tasa es de 30 euros mínimo durante cinco días en el caso de los coches y de 15 euros en el caso de las motos, como ya ocurrió en el año 2023.
Dicha política se viene aplicando desde el año 2021 y comenzó con el cobro de un euro por día a los coches (siendo de 9 euros ahora) y de 0,50 euros para motos, siendo el mínimo de cinco euros y de 2,5 euros, respectivamente, por una estancia de cinco días.
Ibiza se suma a esta ola
Este tipo de medidas parecen haber "tenido éxito" y ya este verano de 2025 empezará a aplicarse también en la isla de Ibiza, aunque en el caso de la isla balear se empezará con el cobro de un euro diario a los coches y las motocicletas estarán exentas, por el momento. Según recoge Diario de Ibiza, desde el gobierno insular de Ibiza se asegura que "la medida no es recaudatoria, sino 100% técnica", pues la aplicación de dicha ley tiene un coste de un millón de euros entre informática, personal, cámaras, etc.
Por su parte, las empresas de alquiler de coches en Ibiza pagarán una cuantía en función del número de vehículos que tengan en flota. Así pues, si la compañía tiene hasta 100 coches a su disposición, tendrá que pagar una tasa de 100 euros. Las compañías que tengan entre 101 y 150 coches tendrán que pagar 200 euros, las que tengan entre 151 y 450 coches tendrán que abonar 750 euros, las que alcancen los 900 coches pagarán 1.500 euros, y a partir de ese límite se tendra que pagar 61 euros por cada "coche extra".
Tanto la política aplicada en la isla de Formentera como la que se empezará a aplicar en la isla de Ibiza tienen por objetivo limitar la entrada de turistas que llegan a sus costas a pasar unos días, tras las continuas protestas de los vecinos, donde algunos incluso han llegado a calificar como "invasión" la llegada de estos turistas que contribuyen a la economía local y que favorecen la creación de empleo en comercios que no existirían de no ser por los turistas.
Es de esperar que este tipo de medidas tengan su réplica en las otras islas e incluso en grandes ciudades de la península, aunque no deja de ser un arma de doble filo, pues puede lograr el deseo de una parte de la población de reducir el número de visitantes que tienen sus islas, pero también puede lograr que esa ola de turismofobia consiga espantar a más turistas de los que desearían y opten por viajar a otros lugares donde no se les culpe de todo.


