
España acumula una subida de precios de un 21,3% desde la llegada de Pedro Sánchez al poder. Una subida que ha generado una potente pérdida de poder adquisitivo en los consumidores que, a su vez, han sufrido una brutal subida de más de 140.000 millones de euros en cotizaciones sociales e impuestos.
Pues bien, en este panorama, el PSOE ha decidido exigir una inspección en todas las tiendas y supermercados de productos básicos de alimentación porque se "aprecian más fallos en medida, visibilidad del precio, o falta de equivalencia en unidad de medida que en las tiendas online". Empieza la nueva cacería para culpar a las tiendas de la subida general y continuada de los precios.
Los socialistas defienden que "para facilitar la comparación de precios entre productos con diferentes formatos, los supermercados deben mostrar, además del precio de venta, el coste equivalente por una unidad de medida estándar". Explican que, "generalmente, esto se expresa por kilo o litro, aunque en algunos casos se usa el metro (para el film de aluminio), la unidad (papel higiénico), la docena (huevos) o el número de usos (detergentes). Sin embargo, en uno de cada cinco casos se han detectado errores significativos, según advierten las asociaciones de consumidores".
Los errores
Con esa argumentación, el PSOE afirma que "un análisis sobre los precios de 10 productos de gran consumo en 28 cadenas de supermercados, tanto nacionales como regionales, publicado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) el pasado mes de diciembre, ha puesto en evidencia diversos errores. El más frecuente es un fallo en el cálculo, como asignar el precio al peso neto en lugar del escurrido".
Los socialistas añaden que "también se han detectado redondeos incorrectos, discrepancias en las unidades de medida (por ejemplo, en los huevos, donde en un mismo establecimiento se indica el precio por unidad y por docena), así como precios poco visibles o sin referencia de equivalencia".
Según el partido de Pedro Sánchez, "los productos más afectados por estas imprecisiones fueron el gel de ducha, los huevos, el desodorante, el detergente y las conservas en lata. Este tipo de errores ya fueron denunciados por OCU a través de estudios similares realizados en 2011 y 2017".
Es más, los socialistas desatacan que "el estudio aprecia más fallos en medida, visibilidad del precio, o falta de equivalencia en unidad de medida que en las tiendas online". Y recuerdan que "el Real Decreto 3423/2000, de 15 de diciembre, por el que se regula la indicación de los precios de los productos ofrecidos a los consumidores y usuarios establece una obligación general de indicar el precio de venta y el precio por unidad de medida a la vez, para todos los productos, tanto si se trata de productos alimenticios como no alimenticios".
Y, por todo ello, exigen a su propio Gobierno, "en colaboración con las comunidades autónomas, reforzar la vigilancia e inspección, en el marco de las campañas de control del mercado, para garantizar el cumplimiento de la obligación de indicar de forma visible, correcta y simultánea el precio de venta y el precio por unidad de medida en todos los productos, tanto alimentarios como no alimentarios, ofrecidos por los comerciantes a los consumidores".


