
La operación corporativa más ambiciosa de la banca española en los últimos años ha llegado a su fin. La OPA lanzada por BBVA sobre Banco Sabadell se ha saldado con un fracaso: apenas el 25,47% de las acciones con derecho a voto de la entidad catalana han aceptado la oferta, muy por debajo del 50% exigido para tomar el control. La noticia, comunicada por la CNMV con el mercado ya cerrado el jueves, ha provocado una fuerte sacudida en la Bolsa española.
Las acciones de BBVA se disparaban este viernes un 7%, hasta los 16,82 euros, impulsadas por el alivio de los inversores tras el cierre del proceso, mientras que las del Sabadell se desplomaban más de un 6%, hasta los 3,02 euros. Es más, el BBVA ha estado anotándose más de un 10% en algunos momentos tras la apertura. El resto del sector bancario también sufría: Santander cedía casi un 4%, CaixaBank un 3%, y Bankinter y Unicaja más de un 2%.
El BBVA había condicionado la eficacia de su oferta a obtener al menos la mitad del capital de Sabadell, un umbral que ni siquiera logró acercar. Tampoco superó el 30%, porcentaje clave para poder relanzar la operación en una segunda fase. En total, la oferta fue aceptada por 1,27 millones de acciones, equivalentes al 25,33% de los títulos a los que se dirigía.
El revés pone fin a 17 meses de idas y venidas desde que el 9 de mayo de 2024 Carlos Torres Vila anunció su intención de absorber al banco catalán. Durante este tiempo, ambos valores han protagonizado un rally bursátil notable: BBVA se ha revalorizado más de un 50% y Sabadell casi un 80%, pasando de 10,29 a 15,71 euros y de 1,79 a 3,23 euros por acción, respectivamente. Su capitalización conjunta ha aumentado en más de 37.000 millones de euros, hasta los 90.570 millones de BBVA y 16.500 millones de Sabadell.
BBVA, por su parte, ha reaccionado con rapidez. Minutos después del anuncio, comunicó que retomará "de manera acelerada" su política de remuneración al accionista: iniciará el 31 de octubre una recompra de acciones de 1.000 millones y abonará el 7 de noviembre el mayor dividendo a cuenta de su historia, 0,32 euros por acción (1.800 millones en total). Además, prevé una nueva recompra significativa en cuanto reciba el visto bueno del BCE.
Pese al golpe reputacional, el mercado parece premiar la liberación de riesgos. "BBVA sale fortalecido financieramente, aunque con un desgaste político y mediático considerable", señalan los analistas. La consolidación bancaria, mientras tanto, seguirá pendiente.


