Un día después de que Pedro Sánchez anunciara ante el Círculo de Economía de Barcelona la celebración de una consulta popular sobre la opa del BBVA al Sabadell, Alberto Núñez Feijóo ha acudido al mismo escenario para mostrar su rechazo a esta iniciativa. El presidente del Partido Popular se declara "profundamente preocupado" por lo que califica como una decisión "frívola".
"Se estará utilizando un procedimiento no incluido en la ley para valorar una operación empresarial, eso marca un precedente para cualquier tipo de operaciones de fusiones entre empresas en España", ha advertido, hablando de posibles "consecuencias patrimoniales" sobre una decisión que puede ser considerada "arbitral". "Gobernar es indelegable", ha dicho Feijóo, acusando a Sánchez de falta de "liderazgo" por no pronunciarse.
El presidente del PP ha evitado pronunciarse de forma expresa sobre la fusión, aunque ha dejado entrever que no ve con buenos ojos la operación al asegurar que "a mí me gusta la competencia". La CNMC ha avalado la fusión, aunque bajo una serie de condiciones. En opinión de Feijóo, el objetivo de Sánchez es utilizar la consulta para desautorizar a este organismo de forma soterrada. Especialmente después de que el socio del Gobierno, Carles Puigdeont, haya mostrado su rechazo a la opa, condicionando quizá a Sánchez.
¿Tapar el caos ferroviario y el apagón?
Feijóo se ha referido también al caos ferroviario de las últimas horas, señalando especialmente al ministro de Transportes, Óscar Puente. "El caos ferroviario no es un incidente aislado, es una forma de gobernar", ha dicho, para asegurar que "cuando se gobierna a golpe de tuit, la gestión es un meme constante". El ministro es especialmente activo en redes sociales donde, de forma habitual, se dedica a insultar y señalar a medios de comunicación o a ciudadanos particulares.
El apagón de la semana pasada, por la que Pedro Sánchez comparece este miércoles en el Congreso, también ha sido motivo de crítica para el líder del PP, que ha vuelto a pedir una auditoría internacional independiente para garantizar que "se sepa la verdad", manifestando sus dudas sobre lo que pueda decir el Gobierno, especialmente después de que no haya informado todavía de las causas cuando ha pasado ya una semana.