La presidenta de la Comunidad de Madrid mantuvo este lunes un encuentro en la Real Casa de Correos con un grupo de usuarios de la residencia de mayores Amavir Nuestra Casa –Collado Villalba que participan en el proyecto Tejiendo Solidaridad.
Esta iniciativa es una de las actividades que organiza la Consejería de Familia, Juventud y Política Social en los centros residenciales y de atención diurna para fomentar la colaboración y el envejecimiento activo de los mayores de la región.
Isabel Díaz Ayuso charló con Manuela, Rosa, Dolores y Marina, que le han contado sus experiencias en el centro y en este taller y le han obsequiado con una bufanda con los colores de la bandera de la Comunidad de Madrid.
Esta reunión se produce también en plena guerra que la oposición le ha declarado a la presidenta madrileña por las residencias de mayores. Primero fue Vox el que, a través de Rocío Monasterio, decidió activar una propuesta de creación de una comisión de estudio para "analizar las causas que provocaron la mortalidad (en las residencias) derivada de la pandemia de la Covid-19 y establecer propuestas de mejora para evitar que se produzca una situación similar" en el futuro.
Acabó retirándola, pero las tres formación de izquierda han registrado su propuesta de creación de una comisión de investigación sobre este asunto que, aunque no tiene posibilidades de prosperar ya que PP y Vox votarán en contra, no dejarán de reivindicar en los meses que restan para las elecciones.
‘Tejido Solidaridad’
Tejiendo Solidaridad es un proyecto que se desarrolla desde 2015 con la Asociación de Labores Solidarias IAIA y en el que actualmente disfrutan 119 mayores de nueve residencias y cuatro centros de día de la región. En este taller tejen durante todo el año prendas como gorros, bufandas o calcetines, además de muñecos o mantas que se destinan a personas en situación de vulnerabilidad social que forman parte de los diferentes proyectos en los que coopera esta entidad sin ánimo de lucro tanto en España como en Sierra Leona, Camboya o Marruecos.
Esta actividad se incluye en el Programa para la dinamización de la vida cotidiana de los centros residenciales y diurnos para mayores, en el que ya han participado más de 80.000 personas y que ofrece diferentes propuestas para mejorar su calidad de vida, mantenerles activos y luchar contra la soledad no deseada.