La rueda de prensa que dio este lunes Isabel Díaz Ayuso tras hacerse público su rechazo a acudir a la reunión bilateral con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a La Moncloa recordó a aquella que ofreció, también desde la Real Casa de Correos -sede del Gobierno regional-, contra la dirección nacional de su partido, en aquel momento capitaneada por Pablo Casado.
No se dejó nada por decir en aquella ocasión. Tampoco ahora. La presidenta de la Comunidad de Madrid volvió a explicarse de forma clara, nítida, ante la opinión pública. Esta vez contra el acoso y derribo al que, a su juicio, le viene sometiendo a ella y su a entorno personal el Gobierno central, siendo éste uno de los motivos de haber declinado la invitación de Pedro Sánchez a acudir a La Moncloa en el marco de la ronda de reuniones bilaterales que viene manteniendo con los distintos presidentes autonómicos.
"Hoy hace diez años que falleció mi padre. Llevo cinco defendiendo su nombre. Llevo cinco años soportando todo tipo de insidias, de calumnias y lo han hecho en todo momento para intentar, emocionalmente, destruirme. Tienen que ir a lo personal porque en las urnas no pueden. Y porque no tengo nada y han sido tantos años intentándolo que lo que han hecho es una lista de mi entorno. ¿Quién la rodea? Vamos a intentar hundirles a ellos: a mi jefe de Gabinete, a mis amigos, aunque fuera gente prestigiosa en el mundo de la cultura (hablaba aquí de Nacho Cano), a cada uno de mis familiares… Lo han hecho hasta con mi pueblo, con mi colegio, con mi barrio, con mi casa. Lo hacen con todo y, por supuesto, con mi pareja", enumeró la presidenta de la Comunidad de Madrid.
"Me han llamado genocida, asesina, loca, ida, corrupta. Cinco años llevo, cinco años. Y no lo hace uno cualquiera, lo hace el presidente del Gobierno, 22 ministros y todos los altos cargos socialistas, que son obligados a hacer lo mismo, da igual el rincón de España en el que se encuentren", añadió.
Aún con todo, la presidenta señaló que "siempre" ha estado ahí. Ahora bien, tras lo ocurrido los últimos días ha dicho basta. "Creo que ya cuando el presidente del Gobierno, desde el Congreso de los Diputados, la semana pasada decide decir que la Comunidad de Madrid es el foco del fango y de la corrupción en España y lo hace (también) en un viaje oficial en Bruselas volviendo a difamarme, a mi entorno", algo a lo que se han sumado "ministros a lo largo de las últimas horas…". Pues hasta aquí ha llegado. Porque, además, considera que estas "reuniones no sirven para nada".
Como ejemplo, puso al presidente socialista de Castilla-La Mancha. "Fue Page el otro día, no había salido por la puerta y le habían colocado un aeropuerto para inmigrantes sin consultarle. ¿Es de recibo el trato que le han dado al presidente de Castilla-La Mancha y al resto de presidentes que muchos han dicho ‘me fui con las manos vacías’?", se preguntó.
"Nos quiere hacer cómplices de su pacto con ERC"
En este punto, la presidenta recordó que su postura, muy reticente a acudir a La Moncloa desde el minuto uno, la trasladó al Comité Ejecutivo Nacional del PP. Allí expuso que el presidente del Gobierno estaba organizando esta ronda de consultas "para hacernos cómplices de su pacto con Esquerra". "Lo que necesita es forzar una imagen de supuesta unidad, tratarnos como si fuéramos mini Estados, y mientras que los presidentes que representamos al 70% de los españoles no somos consultados por nada, se pacta esa caja común y después se nos llama a blanquear o, sobre todo, a reconocer o dar por válido un pacto que es inasumible, que es a todas luces ilegal, que rompe con España, que rompe su economía, que somete a subidas de impuestos al resto de los españoles, que detrae recursos de todos los españoles, especialmente a Madrid, algo muy preocupante".
Para Ayuso, acudir a esta reunión también significaba "dar por válido que se esté fabricando una nación con el sufrimiento de todos los españoles, preparando un nuevo golpe porque, una vez que gestionen su caja, ya ni siquiera se les va a poder frenar". Y esto, insistió, "va contra el Estado de derecho, contra la verdad, contra la historia y contra la solidaridad de todos los españoles".
La presidenta madrileña subrayó que respeta la decisión del resto de presidentes autonómicos del PP que les lleva a acudir a La Moncloa. "Da igual lo que haga, da igual lo que diga. Hay que intentar dividirme del presidente Feijóo, del resto de mis compañeros, hay que intentar aislarme mediáticamente para intentar siempre arrinconarme...". Pero ella simplemente quiere que quede clara su postura, dijo.
"Respeto totalmente su decisión. Entiendo totalmente la situación que tienen mis compañeros", incidió. Pero "yo tengo claro que esto va contra los intereses de España y, por tanto, de Madrid de manera directa". Y "no sirve para nada", ahondó. En este sentido, Ayuso afirmó: "Yo le puedo asegurar a los ciudadanos que si yo supiera que esto sirve para algo, no dudaría en hacerlo porque, total, llevo así cinco años, sometida a una campaña de desprestigio al más alto nivel y utilizando todos los poderes del Estado".