
Con la llegada de la primavera y el aumento de las temperaturas, en la Comunidad de Madrid se incrementa la presencia de garrapatas, unos parásitos que pueden transmitir enfermedades tanto a personas como a animales. Ante este escenario, las autoridades sanitarias han reforzado las recomendaciones para prevenir sus picaduras y reducir los riesgos asociados.
¿Qué son las garrapatas y por qué son peligrosas?
Las garrapatas son pequeños parásitos pertenecientes a la clase de los arácnidos, como las arañas y los ácaros. Se alimentan exclusivamente de la sangre de mamíferos, aves, reptiles e incluso humanos, a los que se adhieren mediante una mordedura con su aparato bucal especializado.
Su peligrosidad no se debe tanto a la picadura en sí, que por lo general es indolora, sino al hecho de que pueden actuar como vectores de diversas enfermedades infecciosas. Es decir, pueden transmitir patógenos (virus, bacterias o protozoos) de un huésped a otro mientras se alimentan.
Recomendaciones
Desde la Comunidad de Madrid y el Cuerpo regional de Agentes Forestales se aconseja:
- Evitar paseos por zonas con vegetación densa, especialmente en parques, jardines y áreas rurales donde las garrapatas suelen habitar.
- Transitar preferentemente por la parte central de los caminos para evitar el contacto con la vegetación de los laterales, donde las garrapatas esperan el paso de animales o personas.
- No sentarse en el suelo en lugares con mucha vegetación.
- Llevar ropa de color claro para facilitar la detección de garrapatas adheridas, además de prendas de manga larga, pantalones largos, botas cerradas y calcetines que cubran bien la piel.
- Aplicar repelentes autorizados en la piel expuesta para mayor protección.
- Proteger a las mascotas con tratamientos antiparasitarios regulares y revisar su cuerpo tras las salidas al exterior.
Cómo actuar
Tras la exposición al medio natural, es fundamental revisar cuidadosamente la piel, prestando especial atención a zonas como axilas, ingles, detrás de las orejas, el cuero cabelludo y el ombligo. Si se detecta alguna garrapata:
- Usar guantes o pinzas finas para extraerla, agarrándola lo más cerca posible de la piel.
- Tirar de la garrapata con un movimiento firme, continuo y perpendicular para evitar que el cuerpo quede adherido o que libere toxinas.
- Nunca retorcer, aplastar, ni arrancar violentamente la garrapata.
- Limpiar la zona con jabón tras la extracción.
- Si no se puede retirar la garrapata, acudir a un centro sanitario.
- No usar métodos tradicionales como rociar la garrapata con alcohol o aceite, ya que son ineficaces y peligrosos.
- Si aparecen síntomas como fiebre, erupciones cutáneas o malestar general en los días posteriores, consultar al médico inmediatamente.
Protección para las mascotas
Las garrapatas no solo afectan a los humanos, sino también a perros y gatos, que pueden actuar como vectores de enfermedades. Es vital que las mascotas reciban tratamientos antiparasitarios regulares, se inspeccionen tras las salidas al exterior y se mantenga una correcta higiene para evitar la proliferación de estos parásitos.
La Comunidad de Madrid está implementando medidas de control en espacios públicos y campañas de sensibilización para informar a la población sobre los riesgos y las formas de protección frente a las garrapatas con "el objetivo de fomentar la detección precoz y la extracción correcta para evitar complicaciones", según ha explicado la CAM en su comunicado.


