LD (Agencias)
Zhang Oiyue manifestó que "las negociaciones multipartitas deben continuar entre todos los países involucrados para asegurar un acuerdo pacífico sobre la escalada nuclear en la península coreana". El funcionario admitió que el asunto nuclear en la península coreana "es un tema muy delicado, ya que cada parte tiene opiniones contrarias y soluciones diferentes que complican aún más la solución pacífica".
China, uno de los pocos aliados de Corea del Norte y principal suministrador de alimentos y combustible, desea encontrar una solución consensuada entre los seis países que asistieron a finales de agosto a las negociaciones de Pekín. La crisis irrumpió cuando EEUU anunció en noviembre pasado que los norcoreanos admitieron poseer un programa de armas nucleares, manifestaciones que corroboró Pyongyang reactivando sus plantas nucleares y expulsando a los inspectores internacionales.
En agosto Corea del Norte, EEUU, China, Japón, Corea del Sur y Rusia se reunieron en Pekín para buscar conjuntamente una solución a la crisis, sin embargo, las conversaciones terminaron sin éxito al negarse Washington a firmar un tratado de no agresión y Pyongyang a detener su programa nuclear. Desde entonces, Pyongyang rechaza una segunda reunión al considerarla "inútil e infructuosa", mientras que las autoridades chinas piensan que es la "única vía posible para alcanzar una solución pacífica en la crisis nuclear".
China, uno de los pocos aliados de Corea del Norte y principal suministrador de alimentos y combustible, desea encontrar una solución consensuada entre los seis países que asistieron a finales de agosto a las negociaciones de Pekín. La crisis irrumpió cuando EEUU anunció en noviembre pasado que los norcoreanos admitieron poseer un programa de armas nucleares, manifestaciones que corroboró Pyongyang reactivando sus plantas nucleares y expulsando a los inspectores internacionales.
En agosto Corea del Norte, EEUU, China, Japón, Corea del Sur y Rusia se reunieron en Pekín para buscar conjuntamente una solución a la crisis, sin embargo, las conversaciones terminaron sin éxito al negarse Washington a firmar un tratado de no agresión y Pyongyang a detener su programa nuclear. Desde entonces, Pyongyang rechaza una segunda reunión al considerarla "inútil e infructuosa", mientras que las autoridades chinas piensan que es la "única vía posible para alcanzar una solución pacífica en la crisis nuclear".
