L D (EFE) El diario The Washington Post informa en su edición de este lunes de que las autoridades de EEUU planean consolidar sus planes de verificación y almacenamiento de los datos personales de los pasajeros.
El objetivo de esta base de datos sería asignar a cada pasajero un número y un código de color según el rango de peligro que represente para la seguridad nacional de los Estados Unidos.
Otro programa por separado estaría destinado a agilizar los trámites para las personas que viajan por asuntos de negocios y otros viajeros frecuentes, siempre y cuando facilitaran su información personal de forma voluntaria. Los críticos del sistema del banco de datos afirman que eso crearía dos clases de pasajeros: los que tienen pase rápido y los que no, entre los que se contaría a los extranjeros.
Los que no son ciudadanos estadounidenses, además, serían sometidos a interrogatorios adicionales de seguridad en los puntos de control de entrada. La Administración de Seguridad del Transporte informó de que incluso los pasajeros clasificados como de confianza tendrían que pasar por los puntos de control electrónico de los aeropuertos.
Otro programa por separado estaría destinado a agilizar los trámites para las personas que viajan por asuntos de negocios y otros viajeros frecuentes, siempre y cuando facilitaran su información personal de forma voluntaria. Los críticos del sistema del banco de datos afirman que eso crearía dos clases de pasajeros: los que tienen pase rápido y los que no, entre los que se contaría a los extranjeros.
Los que no son ciudadanos estadounidenses, además, serían sometidos a interrogatorios adicionales de seguridad en los puntos de control de entrada. La Administración de Seguridad del Transporte informó de que incluso los pasajeros clasificados como de confianza tendrían que pasar por los puntos de control electrónico de los aeropuertos.
