LD (Agencias) El Ejército estadounidense ha pedido a la población civil de Nayaf que abandone la ciudad y exigió a los seguidores de Muqtada al Sader que depongan las armas. Según varios residentes, la advertencia puede ser el preludio de una ofensiva de EEUU.
Varias agencias de noticias han confirmado que en los combates de este martes en Nayaf entre soldados de EEUU y miembros del autodenominado "Ejército Mahdi" se han cobrado la vida de quince personas y han dejado heridas a otras treinta.
Los enfrentamientos comenzaron después de una noche en la que se escucharon intermitentes tiroteos en el casco viejo de la ciudad, donde se atrincheran los terroristas, según han explicado vecinos de Nayaf a la radio local Dijla. La reanudación de los combates es más notable en el campo santo de Nayaf, reducto en el que se han hecho fuertes los insurrectos, y que de nuevo era sobrevolado por helicópteros artillados.
Al Sader efectuó el lunes un llamamiento a sus seguidores para que no abandonen la lucha por la defensa de sus posiciones en Nayaf, y advirtió que permanecerá en la ciudad santa chií hasta "derramar la ultima gota de sangre". En tanto, las tropas de EEUU recibieron ya autorización del gobernador de Nayaf para avanzar hasta la misma mezquita de Ali ben Taleb, con el fin de expulsar de esa zona a los terroristas. Según un balance de los últimos cinco días, al menos 360 chiíes y cuatro militares han muerto.
Por su parte, el general estadounidense George Casey, máximo responsable de las fuerzas de EEUU en Irak, ha ordenado al contingente militar de Polonia que entregue a sus tropas el control de las provincias de Nayaf y Nasiriya, según anunció la División Multinacional en un comunicado. Varsovia mantiene el control sobre otras tres provincias iraquíes.