LD (EFE) En respuesta a una reclamación oficial que el Comité para la Protección de Periodistas presentó hace 19 meses bajo la Ley de Libertad de Información estadounidense, el Pentágono ha presentado la versión integra y definitiva sobre el informe elaborado por su personal respecto a la muerte de los cámaras José Couso y Taras Protsyuk ocurrido el ocho de abril de 2003, cuando un tanque estadounidense abrió fuego contra el hotel Palestina de Bagdad, en el que se alojaban numerosos periodistas, durante la guerra en Irak.
El informe, según indica el Comité en un comunicado, refuerza sus propias conclusiones de que la muerte de Couso, que trabajaba para la cadena española de televisión Telecinco, y Protsyuk, de Reuters, "no fue deliberada, pero sí pudo haberse evitado".
El informe del Pentágono reitera declaraciones previas acerca de que los soldados abrieron fuego para responder a disparos enemigos que provenían del hotel. "Eso se contradice con nuestra propia investigación, basada en entrevistas con cerca de una docena de reporteros que se encontraban presentes en el lugar de los hechos. Ninguno de esos periodistas declaró que se hubiera producido fuego hostil que proviniera del hotel", explica el Comité.
Los mandos estadounidenses, continúa la organización, sabían que el hotel estaba lleno de periodistas, pero "aparentemente no comunicaron esa información a las tropas desplegadas sobre el terreno". Un soldado sin identificar, cuyo testimonio se incluye en el informe, afirma que "en ningún momento se habló de zonas en la que no se pudiera disparar o lugares protegidos en la ribera este del río Tigris", donde se encontraba el hotel.
