LD (Agencias) El presidente George Bush se apuntó así una importante victoria política en un momento en el que el creciente número de ataques contra las tropas estadounidenses en Irak están poniendo en duda la gestión de su gobierno en la posguerra iraquí.
El Senado aprobó la versión presentada por la Casa Blanca, pese al intento inicial de los demócratas y de algunos republicanos de conseguir que la mitad del dinero para reconstruir Irak -20.000 millones de dólares- fuera en préstamos y no a fondo perdido. "Como el presidente ha dicho una y otra vez, no abandonaremos a Irak", dijo el presidente del Comité de Presupuestos del Senado, el republicano Ted Stevens, quien añadió que "no dejaremos al pueblo iraquí en una situación de caos, que aprovechen los terroristas". Finalmente, muchos demócratas aceptaron aprobar la partida presupuestaria extraordinaria, alegando que debe servir para apoyar y proteger a las tropas estadounidenses en territorio iraquí y conseguir que puedan regresar a EEUU cuanto antes.
Las fuerzas estadounidenses sufrieron el domingo el día más difícil desde que el presidente Bush declaró terminada la principal fase de operaciones militares en Irak el pasado primero de mayo. Un total de 19 soldados estadounidenses murieron en una sola jornada, 16 de ellos al ser derribado con un misil portátil tierra-aire el helicóptero de transporte en el que viajaban.
